Zacatecas, Zac.- “Nos deja una lección de que todavía son muchas las cosas que tenemos que ir mejorando” expresó Juan José Rangel Martínez, director de la Policía Municipal de Zacatecas, en referencia a la mujer que se arrebató la vida en una celda de los separos.
Explicó que fue un hecho insólito lo que pasó la madrugada del pasado viernes (santo), donde autoridades de esa corporación, encontraron a Marianela “N”, de 34 años, fallecida y suspendida del cerrojo de una celda de la prisión preventiva.
“Era una persona que había ingresado aquí en varias ocasiones” detalló, agregando que ese mismo día había sido reportada seis veces, siendo la última donde fue detenida en la colonia Pánfilo Natera.
Abundó, que la ahora fallecida, al parecer, tenía problemas con su pareja sentimental y con varias personas, que además, en el momento de su arresto se encontraba en estado de ebriedad.
Detalló, que tanto el personal de custodia como médico, la frecuentaron durante su escasa estancia en la celda (dos horas) en varias ocasiones, en las cuales nunca se detectó ninguna irregularidad.
No obstante, comentó que el hecho ocurrió de manera inesperada y rápida, pues destrozó una cobija vieja, misma que le fue brindada en los separos y la ató al cerrojo y a su cuello, “dejándose caer de golpe”, ocasionándose una muerte inmediata.
Pese a ello, Rangel Martínez reconoció que esta experiencia los pone alerta sobre las deficiencias que aún existen en las instalaciones, como son las cámaras de seguridad, que a pesar de que sí hay, no funcionan en su totalidad.
“Es algo que tenemos que cambiar, porque tuvo que pasar una situación grave y triste, (…) y tenemos que ver nosotros la forma de dar esa seguridad; eso, nos deja esa experiencia, de tener que corregir”, dijo.
