Numerosos clubes de fútbol turco han aplaudido este sábado la decisión del Galatasaray y el Fenerbahçe de no jugar la Supercopa turca en Arabia Saudí, tras impedir las autoridades saudíes el uso de imágenes y lemas de Atatürk, fundador de la república turca, en el partido.
Varios clubes, entre ellos el Besiktas, mayor rival de los dos contrincantes del derbi, han ofrecido su propio estadio para jugar el partido que se canceló anoche en Riad, y otros, como el Trabzonspor, han difundido en sus redes sociales imágenes de Atatürk.
La Supercopa entre el Galatasaray, campeón de la Liga, y el Fenerbahçe, campeón de la Copa turca 2022/2023, iba a jugarse anoche en el estadio Al Awwal de la capital saudí, pero se canceló al no permitir las autoridades saudíes que los jugadores de ambos equipos vistieran durante el calentamiento camisetas con la imagen de Mustafa Kemal Atatürk, fundador de la República turca en 1923.
Tampoco permitieron que los equipos desplegaran una pancarta que celebrara los 100 años de la república turca con el lema acuñado por Atatürk: "Paz en casa, paz en el mundo".
Finalmente, ambos clubes y la Federación Turca del Fútbol (TFF) emitieron un comunicado en el que anunciaron el "aplazamiento" del partido, sin fecha ni lugar.
Los equipos volvieron la misma noche a Estambul, donde fueron recibidos al amanecer en el aeropuerto como héroes por numerosos hinchas, que ondeaban retratos de Atatürk y aplaudían la decisión de los jugadores.
Al mismo tiempo, el Ankaragücü invitó en su cuenta a ambos clubes a jugar la Supercopa en su propio estadio, para hacerlo en la capital elegida hace 100 años por Atatürk.
El Besiktas ofreció su propio estadio, por hallarse en el barrio en el que vivía Atatürk en Estambul, y el Antalyaspor el suyo porque el padre de la patria, recordó, había descrito una vez Antalya como la ciudad más bella del mundo.
El Samsunspor, por su parte, subrayó su invitación recordando que fue en esta provincia donde Atatürk inició la guerra por la liberación del país en 1919.
En las redes sociales se han multiplicado los mensajes que piden la dimisión del presidente de la TFF, Mehmet Büyükeksi, y la propia Federación tuvo que desmentir a los medios que el dirigente hubiera dado este paso, informa la cadena NTV, subrayando que también son falsos los rumores sobre un supuesto deterioro de su salud.
El Gobierno turco, por otra parte, ha mantenido silencio sobre el asunto, pese a las posibles implicaciones diplomáticas, y únicamente el portavoz del partido islamista AKP, que dirige el país desde 2002, Ömer Çelik, agradeció en un brevísimo mensaje a la ciudadanía su apoyo a Atatürk.
El ministro de Justicia, Yilmaz Tunç, por su parte, anunció hoy que la Fiscalía "investigará mensajes provocativos y delictivos en las redes sociales tras el aplazamiento de la Supercopa", sin especificar más.