Los robos de equipo y actos vandálicos en pozos de la Junta Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado de Zacatecas (JIAPAZ), han provocado pérdidas millonarias y la interrupción del suministro en por lo menos tres de los cuatro municipios donde presta su servicio el organismo operador.
Durante los años 2022 y 2023 se registraron 31 daños en pozos de extracción, principalmente por el robo de arrancadores y cable, así como la destrucción de equipo de medición eléctrica, cuyas reparaciones tuvieron un costo acumulado de dos millones 530 mil pesos.
David García Flores, director de la Junta comentó que los culpables seguramente tienen conocimiento en equipos electromecánicos y cuentan con equipo especializado para desinstalar equipo y cable que se encuentra hasta a 300 metros de profundidad.
“No cualquier persona se atreve a meterle mano al alto voltaje, son gente que seguramente conoce de esto porque tiene qué cortar con cuidado la corriente de la subestación eléctrica”, comentó anteriormente el funcionario.
Cabe señalar que, en 20 de los 31 casos, la Junta Intermunicipal interpuso denuncias ante la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE), sin embargo, no ha habido detenidos.
Delitos en aumento
Tan sólo durante el 2023 -el año con mayor incidencia- un total de 16 delitos representaron un costo de un millón 455 mil pesos, de acuerdo con datos proporcionados por la JIAPAZ a través de la Plataforma Nacional de Transparencia.
Cada uno de estos incidentes afectó a miles de usuarios. El acto con mayor impacto en el servicio durante el 2023, fue el robo de cables y “el vandalismo al corte de cables” en el pozo número seis del sistema Benito Juárez en la capital del estado, el cual abastece a 47 mil personas en colonias y fraccionamientos como Lomas del Campestre, Colonial, Agronómica, entre otras.
Los dos robos más cuantiosos registrados hasta el momento tuvieron lugar en el pozo de rebombeo del municipio de Morelos, los cuales ocurrieron en dos fechas de mayo del 2023 e implicaron un costo de 750 mil pesos.
En 2022, el sistema de abastecimiento más afectado fue el de La Joya, también ubicado en el municipio de Morelos, en el cual se registraron ocho actos de vandalismo de los 15 ocurridos ese año.
El último hecho ocurrió el 28 de noviembre, cuando fue destruido el equipo de medición de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y un dosificador de equipo; la reparación del daño costó 116 mil pesos, daño que provocó que el servicio se interrumpiera 24 horas en el pozo Lo de Vega, en el municipio de Guadalupe.