El distanciamiento entre el rector Rubén Ibarra Reyes y la nueva dirigencia del Sindicato del Personal Académico de la Universidad Autónoma de Zacatecas (SPAUAZ) afecta a más de 42 mil alumnos que este lunes no podrán regresar a las aulas para iniciar el ciclo escolar 2023-2024, como lo marca el calendario oficial.
El paro que inició a las siete de la mañana y concluye 12 horas después -según se acordó al interior del sindicato- es la primera protesta formalmente encabezada por Jenny González Arenas, quien apenas hace dos meses rindió protesta como la primera mujer al frente de la organización tras ganar la elección interna con una diferencia de sólo dos votos.
Minutos después de que inició el paro, el secretario general de la UAZ, Ángel Román, confirmó el bloqueo de todas las áreas e hizo un llamado a los trabajadores académicos al diálogo y a la conciliación
Dirigiéndose a padres de familia y alumnos, aseguró que, en lo inmediato, las autoridades de rectoría tratarán de resolver este problema para iniciar presencialmente las clases del nuevo ciclo escolar.
Sin condiciones para iniciar semestre: SPAUAZ
Según expresó la dirigente del SPAUAZ, no hay condiciones para iniciar el semestre porque la rectoría incumplió con la entrega de las cargas de trabajo docente que dé certeza al trabajador sobre el pago de su salario, además de que aún se adeudan quincenas y prestaciones del pasado semestre, entre otras faltas.
Incluso, la dirigencia del Sindicato acusa a Rubén Ibarra de “sabotear la vida sindical y la lucha legítima (…) actuando con arbitrariedad y autoritarismo”.
Según el rector declaró a El Sol de Zacatecas, la protesta obedece más a intenciones políticas, pues la parte patronal sí cumplió las demandas del sindicato.
Los cerca de 12 mil alumnos de nuevo ingreso y los más de 30 mil de reingreso en los niveles secundaria, preparatoria, licenciatura, posgrado y especialidad, este lunes encontraron las puertas cerradas de las 33 unidades académicas, en las que se imparten 136 programas educativos.
No sólo tres mil docentes estarán en paro, sino también dos mil 200 administrativos agremiados al Sindicato de Trabajadores de la UAZ (STUAZ) quienes se iban a reintegrar a sus áreas laborales este 14 de agosto, aunque algunos ya lo habían hecho desde el pasado lunes.
Exigencias y acusaciones
“desde el pasado lunes., como sindicato hemos tenido disposición para que se abran oportunidades de trabajar seriamente e iniciar con normalidad nuestras actividades (…) sin embargo de la rectoría sólo ha habido resistencia a seguir las reglas de nuestro Contracto Colectivo”, acusó el SPAUAZ en un comunicado emitido este fin de semana.
Además del presunto incumplimiento de las cargas de trabajo, denuncian que le rector otorgó plazas y horas base de manera discrecional y fuera de convocatoria, sabiendo que bilateralmente está pactado un procedimiento que debe incluir la participación del sindicato.
“Contrario lo que el rector ha dicho en prensa, hay un número de docentes a quienes se les adeuda de manera parcial los salarios devengados del semestre concluido, lo que repercute en el pago proporcional de sus prestaciones"
El sindicato acusa también a Rubén Ibarra de “una agresión a todo el sindicato” porque el pasado 11 de julio impuso a los integrantes del comité ejecutivo una licencia sin goce de salario sin solicitud alguna y de manera arbitraria.
En su pliego de exigencias, se expone la necesidad de retirar la amenaza de dichas licencias sin goce de salario, la entrega de cargas de trabajo, la apertura de una convocatoria de basificación e incrementos de base, y que “el rector no llame a prácticas de esquirolaje que sabotean las acciones sindicales”.
“Paro injusto”
El rector Rubén Ibarra reconoció que el paro es injusto para los alumnos y para los padres de familia que hacen un esfuerzo mayúsculo para que sus hijos estudien.
Agregó que “no había razón de ser” de la protesta, pues se entregó al sindicato toda la información que solicitó, y posteriormente no recibió una sola observación.
Afirmó que en la última reunión del sindicato se violaron los estatutos, pues de un total de 170 integrantes de la coordinadora de delegados, solo 21 votaron a favor del paro que terminó por aprobarse: “Las decisiones, por estatuto, se deben tomar con dos terceras partes de la coordinadora a favor de una propuesta, es decir, con por lo menos 114 personas".
