A 41 días de que se registraran bloqueos con vehículos incendiados por un grupo delincuencial en carreteras de cuatro municipios de Zacatecas, las unidades calcinadas siguen abandonados a pie de carretera, denunciaron integrantes del Congreso del Estado.
Los hechos violentos ocurrieron desde el 29 de marzo, casi de forma simultánea, en Noria de Ángeles, Pánfilo Natera, Villa Hidalgo y Pinos. En su momento, la Mesa Estatal de Construcción de Paz en Zacatecas anunció que en dicha jornada de actos violentos, se detuvo a varias personas en posesión de cartuchos, equipo táctico y probable droga.
“Sobre la carretera estatal 144, los probables integrantes de un grupo delincuencial, lanzaron estrellas metálicas conocidas como poncha llantas y realizaron bloqueos para obstruir la circulación y con ello evitar el arribo de más elementos de las corporaciones”, señaló la autoridad en un comunicado.
Casi seis semanas después, la Legislatura del Estado aprobó un punto de acuerdo para exhortar “respetuosamente” al gobernador del Estado, David Monreal Ávila, y al fiscal general de justicia del estado, Francisco Murillo, “ordenen a las instancias correspondientes, a efecto de que sean retirados inmediatamente los vehículos calcinados que permanecen en los tramos carreteros del municipio de Noria de Ángeles”.
“Es patético que a mes y medio las autoridades no hayan podido hacer su trabajo, ¿acaso los vehículos no son indicio de prueba de las carpetas de investigación? Mínimo deberían retirar las unidades para que no parezca zona de guerra”, expresó el diputado Ernesto González Romo, al expresar su apoyo al punto de acuerdo propuesto por la diputada del Partido del Trabajo, Ana Luisa del Muro.
El integrante del grupo parlamentario de Morena, opinó que tal omisión es un mensaje de las autoridades de “absoluto abandono”, pues si no retiran los signos de la violencia, “menos van a llevar a la justicia a quienes cometen estos actos deleznables”.
El diputado independiente, José Luis Figueroa Rangel, consideró que la falta de actuación de las autoridades se debe a que municipios como Noria de Ángeles, son zonas ocupadas por la delincuencia organizada, donde no sólo quedan los vehículos calcinados como vestigio de la violencia, sino también los restos de personas ejecutadas.