Casi todos los habitantes de la comunidad El Durazno, perteneciente al municipio de Jerez, en el estado de Zacatecas, abandonaron sus hogares debido a las violentas represalias de un grupo del crimen organizado que los culpa de haber realizado una denuncia ciudadana que derivó en el operativo que allí tuvo lugar el 4 de noviembre y donde la Guardia Nacional detuvo a 16 personas.
Un grupo de 30 habitantes de la comunidad se manifestaron afuera de Palacio de Gobierno en la capital zacatecana para denunciar asesinatos, secuestros y hasta un ataque con granada en contra de la población, todo a partir de dicho operativo.
El Durazno, comunidad ubicada a ocho kilómetros de la cabecera municipal de Jerez, tiene una población que se dedica a las labores del campo, la cual fluctúa entre los 400 y los 500 habitantes por razones de la constante migración. A decir de su delegado, luego del arribo de los integrantes del grupo criminal quedan sólo cuatro personas.
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No es la primera vez que esto ocurre en el municipio de Jerez, pues en septiembre de 2021 mil 500 personas fueron desplazadas de 13 comunidades por integrantes del crimen organizado.
Desde mediados de este año los pobladores de esas comunidades han comenzado a retornar de manera paulatina.
Bajo amenaza del crimen organizado
Una semana después del operativo de la Guardia Nacional y del Ejército, realizado en la comunidad de El Durzano los delincuentes regresaron y asesinaron a dos menores de 13 y 17 años, a un joven de 19, y secuestraron a dos mujeres de 17 y 19 años. La noche del jueves 24 de noviembre, fue incendiada una casa con una granada de fragmentación donde murió calcinado un hombre de la tercera edad.
Los habitantes huyeron a la ciudad de Jerez y a otros puntos del estado donde -según el delegado- las condiciones de seguridad son mucho mayores.
Es algo increíble lo que nos ha pasado, no creímos nunca que se fuera a dimensionar tanto todo este asunto, tenemos hijos que son atrevidos pero ya vieron que no hay otra opción más que manifestarnos y exigir de la manera más pacífica.
Refirió que el comisionado de atención a desplazados de Jerez, Marco Antonio Vargas Duarte, les prometió el arribo de cien elementos de la Guardia Nacional y del Ejército para vigilar de manera permanente, tanto El Durazno, como otras comunidades cercanas (Luis Moya, San Nicolás y Los Haro) sin embargo, hasta ayer no le habían notificado la fecha de este refuerzo de seguridad.
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Afuera del Palacio de Gobierno, Raúl, otro de los afectados, insistió en que se necesita la interlocución con el gobernador David Monreal: “Esperamos que nos dé la mano, confiamos en él, confiamos en las autoridades, lo único que le pedimos es protección y que nos ayude a localizar a las muchachas que nos faltan”.
"Tenemos terror, nos dejaron solos"
Raúl mencionó que hasta antes del operativo de la Guardia Nacional, El Durazno era “un punto de paz”. Con excepción de “eventos” muy esporádicos, sólo “se les veía pasar” a los grupos de presuntos delincuentes, y también se veía pasar a los uniformados de diversas corporaciones.
No sólo tenemos miedo, tenemos terror, pero tenemos que alzar la voz, no hay más” dijo Alejandro, mientras sostiene una pancarta que dice “La paz de los pueblos es principio de progreso”
Apuntó que la única exigencia es tener la tranquilidad en su comunidad para poder regresar a sus hogares que fueron abandonados de la noche a la mañana: “Dejamos todas nuestras pertenencias, nosotros no conocemos de armas, pero usan granadas en contra de nosotros, eso es terrorismo”.
Mencionó que los ataques a la población se debieron a que las autoridades informaron públicamente que la detención de los delincuentes se dio a raíz de una denuncia ciudadana: “El gobierno nos echó la culpa a nosotros que había sido por una denuncia ciudadana cuando nosotros no tuvimos nada que ver”.
Operativo “por una denuncia ciudadana”: Sedena
De acuerdo con un informe de la Secretaría de la Defensa Nacional, emitido un día después del operativo en El Durazno, se logró la detención de 16 individuos, asegurándoles armamento, cargadores, cartuchos, equipo táctico y un inmueble.
Los hechos iniciaron cuando personal de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano fueron agredidos con armas de fuego por presuntos integrantes de la delincuencia organizada, mientras realizaban “reconocimientos terrestres” en la comunidad.
El informe fechado el 5 de noviembre, detalla que “durante dicha actividad se obtuvo información mediante una denuncia ciudadana respecto a que presuntas personas armadas se localizaban en el interior de un inmueble, por lo que la fuerza de tarea conjunta orientó su despliegue hacia el lugar de los hechos”.
En la conferencia matutina del presidente, Andrés Manuel López Obrador, del 8 de noviembre, Luis Cresencio Sandoval González, titular de la Sedena informó que entre los 16 detenidos hay tres guatemaltecos y un colombiano “que forman parte de los grupos delictivos que general allí violencia en el estado”.
El 10 de noviembre el acontecimiento volvió a ser abordado en la conferencia matutina, pero en esta ocasión por el subsecretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Ricardo Mejía quien volvió a atribuir las detenciones a una denuncia ciudadana”.
En el lugar se aseguraron 17 armas largas, mil 52 cartuchos, 54 cargadores, 12 chalecos tácticos y un inmueble.
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