A pesar de los crímenes recientes, la población de Fresnillo, Zacatecas no ha interrumpido sus actividades cotidianas, aunque las realizan con más temor del acostumbrado.
“Tiene uno miedo salir a la calle, lo hace uno por necesidad, pero también es preocupante que sus seres queridos tengan que salir porque es necesario trabajar para subsistir”, comentó a El Sol de Zacatecas Angélica Martínez Torres, ama de casa y vendedora de alimentos preparados.
Como parte de sus ocupaciones, Angélica debe acudir a la cabecera municipal desde su comunidad, El Pardillo Segundo, pero tomando precauciones, como no salir muy temprano ni muy noche: “No puede uno hacer sus actividades igual, desenvolverse como lo hacía uno, ha cambiado mucho mi rutina y el modo de vivir”.
Angélica forma parte de ese 96.4% de los fresnillenses mayores de 18 años que opinan que "vivir en su ciudad es inseguro" según la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del INEGI, indicador que coloca a Fresnillo como la ciudad con la mayor percepción de inseguridad de todo México.
El municipio más poblado del estado -240 mil 532 habitantes- desde el 2018 ha formado parte de la lista de los 50 municipios prioritarios en la estrategia federal de seguridad por sus altos índices de homicidio. En el 2021 ocupó el tercer lugar nacional en cifra de asesinatos, aunque autoridades estatales afirman que ya bajó al lugar 30.
En los últimos 20 años, Fresnillo ha sido gobernado por tres integrantes de la familia Monreal Ávila, cuyas administraciones suman cerca de 12 años: Rodolfo, en funciones de presidente municipal del 2004 al 2007, David, quien encabezó el ayuntamiento del 2007 al 2010 y Saúl, electo en el 2018 y reelecto en 2021.
Después de la masacre del pasado fin de semana en que seis personas perdieron la vida y un día después del asesinato de Juan Pérez Guardado, todos los negocios abrieron y las escuelas no suspendieron clases.
“Nosotros como maestros, debemos garantizar a los padres que siempre van a tener un lugar seguro para recibir a sus hijos y creo que las escuelas deben ser los lugares más seguros después del hogar”, declaró Omar Serrano Rodríguez, director de la primaria “Álvaro Obregón”, a la cual asisten más de 500 alumnos.
A pocas cuadras del plantel, en la céntrica calle Emiliano Zapata se ubica “Artículos Deportivos El Mike”, que como otros negocios ha sufrido una reducción en sus ventas y se ha visto en la necesidad de modificar sus horarios, según comenta su propietario Miguel Alvarado.
“Ha cambiado mucho la actividad del comercio por el miedo que tenemos los comerciantes, por ejemplo, antes cerrábamos a las ocho de la noche, y ahorita, a las siete ya no hay gente (…) es increíble, la verdad es preocupante todo lo que está pasando”.