Un fuerte estruendo volvió a cimbrar las viviendas de varias colonias y del centro histórico de la capital; aunque los habitantes culpan de ello a la mina Capstone Copper Cozamin, horas después la empresa se deslindó del incidente.
Desde hace cerca de tres años, los vecinos reportan vibraciones que incluso han provocado daños en algunas viviendas. Los incidentes se han incrementado en frecuencia e intensidad en los últimos meses. El último movimiento, ocurrido a las 11:20 de ayer viernes, ha sido uno de los de mayor intensidad.
El incidente fue percibido en las colonias Pedro Ruiz González, Díaz Ordaz, Felipe Ángeles, ubicadas en las inmediaciones de la mina de cobre y plata que opera desde finales del 2006; se sintió, además en lugares más alejados como la colonia Minera y el fraccionamiento Colinas del Padre.
“Sabemos que es la mina, que derrumba grandes cantidades de toneladas de roca sin importarles nuestra seguridad, no esperemos a que ocurra un desastre, así como les valemos nosotros a ellos, queremos que se vayan, no nos importan sus intereses”, declaró Alfonso Beltrán, vecino de la colonia Pedro Ruiz González.
Irma Yolanda Márquez, habitantes de la misma colonia, denunció que, a pesar de los reclamos, las autoridades no han intervenido. Recuerda que durante esta semana se han escuchado y sentido dos detonaciones muy fuertes que provocaron que su vivienda se cimbrara.
Viridiana Robles de la segunda sección de la colonia Díaz Ordaz, comenta que el pasado 9 de noviembre, hubo otra fuerte explosión a las 9:45 de la mañana, lo que provocó fracturas en las paredes, loza y vidrios: “A diario sentimos estos temblores (…) estamos hartos de esto, de sentir y escuchar a diario los movimientos en nuestras casas”, dijo.
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Autoridades indiferentes
Apenas el pasado 3 de octubre, los afectados bloquearon el acceso de Capstone exigiendo que cesen las detonaciones. Afirmaron que para esa fecha ya se había derrumbado el techo de una vivienda, además de los muchos casos de cuarteaduras en paredes y fracturas en pisos. También aseguraron que hay postes de luz y árboles están en riesgo de caer.
Tras la protesta, los afectados se reunieron con autoridades de la Secretaría General de Gobierno, y de la Coordinación Estatal de Protección Civil, según comentó Sonia Félix, vecina de la colonia Díaz Ordaz, cuya vivienda tiene cuarteaduras y vidrios rotos.
Recordó que representantes de la Secretaría de la Defensa Nacional hicieron una inspección durante sólo dos días y no volvieron, por lo que se está valorando llevar las denuncias del caso al gobierno federal e incluso a instancias internacionales como la Unesco. Mencionó además que hace un mes se solicitó un peritaje a Protección Civil “el cual aún no se entrega”.
Capstone se deslinda “por completo”
“Tenemos conocimiento de los reportes ciudadanos respecto a un supuesto estruendo ocurrido este viernes 10 de noviembre alrededor de las 11 de la noche; al respecto, la Minera Capstone Copper Cozmin se deslinda por completo de ello, negamos que la actividad minera sea causante de esto”, señaló la empresa en un comunicado firmado por su gerente de Capital Humano, Saúl Ríos Velasco.
Expuso que en la mina se cumple con rigurosamente con los horarios establecidos para realizar voladuras (de 6:00 a 7:00 horas y de 18:00 a 19:00 horas) en las que se atienden las normas técnicas y de seguridad determinadas por la Secretaría de la Defensa Nacional y “nunca se han realizado detonaciones fuera de este horario y jamás se han hecho voladuras por las noches”.
La empresa ofreció su colaboración con las autoridades federales, estatales y municipales, para realizar una investigación técnica sobre lo sucedido y se determinen las causas reales que provocan “los supuestos estruendos”.
En Capstone trabajan mil personas y adicionalmente se generan cinco mil empleos indirectos. Según información de la empresa, de 2023 a 2030, la producción anual promedio se pronostica en 20 mil toneladas de cobre y 1.3 millones de onzas de plata:
“El plan de la mina en Cozamin se basa en una combinación de métodos de extracción de pozos largos y de corte y relleno; el plan de mina contempla utilizar 10.2 millones de toneladas de mineral de 2023 a 2030”.