La noche del jueves 10 de octubre de 2024 se vivió un evento astronómico sin precedentes en el estado de Zacatecas: una tormenta geomagnética severa G4, de gran magnitud, permitió la observación de auroras boreales en distintos puntos de la región.
Este fenómeno, de una duración mayor a 20 horas, no solo sorprendió a la comunidad científica, sino que capturó la atención de habitantes y fotógrafos.
La tormenta geomagnética, clasificada como G4 en la escala de intensidad, fue desencadenada por una Eyección de Masa Coronal (EMC), una gigantesca liberación de plasma y energía solar que viajó a una velocidad de cuatro millones de kilómetros por hora desde el Sol hacia la Tierra.
Estos eventos son capaces de interactuar con el campo magnético terrestre, provocando la formación de auroras boreales que, en circunstancias normales, sólo son visibles en latitudes cercanas a los polos. Sin embargo, debido a la fuerza de esta tormenta, las auroras se hicieron visibles en latitudes medias y bajas, como en el caso de Zacatecas.
En México, observar una aurora boreal es un evento extremadamente raro. Las auroras boreales son producidas cuando partículas cargadas del viento solar chocan con la atmósfera terrestre, creando una danza luminosa en el cielo nocturno. Si bien este fenómeno puede resultar visible en el hemisferio norte, es muy inusual que ocurra en latitudes tan al sur como Zacatecas.
Para los zacatecanos, fue una oportunidad única de presenciar este fenómeno celeste, aunque muchas veces las auroras no son visibles a simple vista en estas latitudes, sino que requieren cámaras con larga exposición para captarlas.
Así fue como el fotógrafo Daniel Coronado, conocido en redes sociales como "Da Ko", pudo registrar en imágenes la aurora boreal desde la ciudad de Zacatecas. Las fotografías de Coronado, que rápidamente se viralizaron en redes sociales, muestran un cielo teñido de tonos púrpuras, típico de este espectáculo visual.
El fenómeno no solo fue visible en la capital zacatecana. Otros municipios del estado, como Valparaíso, Vetagrande, Monte Escobedo y Mazapil, también fueron testigos de esta maravilla natural. Las auroras boreales, con sus destellos brillantes, ofrecieron un espectáculo que dejó a todos asombrados por su belleza y rareza.
Para quienes no tuvieron la oportunidad de observar el fenómeno, hay buenas noticias: se espera que este viernes 11 de octubre se produzcan nuevamente auroras boreales en la región. Con la continuación de la tormenta geomagnética, existe una alta probabilidad de que los cielos de Zacatecas y otras zonas del norte de México vuelvan a iluminarse con estos colores danzantes.
EL SOL DE ZACATECAS TE RECOMIENDA ESCUCHAR EL PODCAST ⬇️
