Zacatecas, Zac.- "La postura de la Iglesia católica es aceptar a las nuevas autoridades que serán elegidas por el pueblo este primero de julio, quien resulte vencedor", indicó el obispo de la Diócesis de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, quien señaló que "la decisión está en el pueblo, por lo que sea quien sea quien triunfe en las urnas, no se prevé un cambio radical en las políticas del país".
Estableció que sea quien sea el próximo Presidente de la República habrá contrapesos, porque “no se le puede dar todo el poder a una persona”.
Incluso, consideró que esos contrapesos benefician a la ciudadanía, “hay que buscar que haya contrapesos. La gente es muy sabia, sabe diferenciar el voto, hay poca gente que aplica el voto duro y todo el poder a un sólo partido”.
Se sabe que la naturaleza humana se resiste a veces a perder, a aceptar que no tuvo tantos votos, pero hay que apostarle todos a ganar, aunque tenga menos votos que los demás, vamos todos ganando, que nuestro México gane”.
Consideró que trabajar todos por el mismo propósito es posible cuando hay posición de apertura y actitud de aceptación.
Pidió a la ciudadanía ejercer su derecho al voto el próximo primero de julio, en este país democrático el voto de cada ciudadano equivale lo mismo.
Indicó que esto es la civilidad, no solamente antes de las elecciones, sino el día de las elecciones, y después.
Mencionó que en caso que el voto no favorezca a algún contendiente, ofrezca algo más por el bien común, un ambiente en el que la convivencia sea posible.
El obispo de la Diócesis de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, sostuvo que ha tenido acercamientos con candidatos locales, solamente para entablar una plática de temas generales, no de propuestas, para pedirle opinión sobre puntos como la inseguridad, a fin de tener una opinión de qué hacer, para armar propuestas.