“Hace 23 años no me fui de Zacatecas”, dijo el cardenal Javier Lozano Barragán, al señalar que la violencia que se vive en el país es a causa del amor que se tiene al dinero, dijo ver al aborto como un asesinato y al matrimonio igualitario como el origen del placer y no de la vida, “la perversión sexual no es bestial, está más abajo, porque las bestias saben cuándo aparearse”.
Señaló que como dios, el dinero “es un dios muy malo, porque mata a sus seguidores”.
El obispo emérito de la Diócesis de Zacatecas, Javier Lozano Barragán, recordó que durante 12 años tuvo el honor de visitar, de caminar la Diócesis, “hace 35 años que llegué aquí a Zacatecas y hace 23 años no me fui de Zacatecas, me llevaron y ya tengo 23 años en Roma”.
Recordó que el Papa San Juan Pablo II fue quien le hizo el favor de llevarlo a Roma “y es curioso, el Papa aceptó una invitación que se le hizo en la Diócesis de Zacatecas para visitar la ciudad en mayo de 1990”.
“Estuvo medio día, y luego me dijo: ahora tú te vienes para acá, algo que no es muy equitativo, aquí estuvo medio día y a mí ya me tiene allá 23 años”.
Sirvió a la Santa Sede en el ramo de la salud durante 12 años, en que le tocó visitar 47 países en todo el mundo.
LA VIOLENCIA ES ECONÓMICA
Dijo que la violencia que se está viviendo es económica, el crimen organizado es para ganar dinero.
Es una ausencia de Dios, haber tergiversado completamente y haber pensado que se vive nada más en esta vida.
Si se vive nada más en esta y vida hay que pasarla lo mejor y, para ello, hay que tener muchos billetes.
Entonces, que son por la droga, que son por la extorsión, que son por el crimen, no importa tener muchos billetes y, claro, luego ser el más rico del panteón.
La razón de esta inseguridad en México es haber tergiversado el por qué de la vida, que no es el dinero.
Recordó una canción que hasta cierto punto tiene razón: “dinero maldito que nada vale”.
Cuidado con eso, el dinero puede ser muy bueno y debe ser bueno, si se usa como debe de ser; por supuesto, es el intercambio laboral, comercial, es muy bueno, pero como Dios (el dinero) es un Dios muy malo, mata a sus seguidores.
ABORTO
Hay que pensar si es lícito matar a un inocente.
Si se entiende un poco de fisiología humana, el primer conato de hombre, de persona, se llama cigoto, que es la unión del óvulo con el gameto masculino, espermatozoide.
Una vez que el cigoto entra, a las cuatro horas, se tienen las células totipotenciales.
Luego vienen los diversos estadios, el embrión se hace visible sólo hasta la semana 11.
Pero no entra ningún factor externo, se hace visible a la semana 11, pero no entra nada más para hacerlo visible, sino su desarrollo.
Así viene el primer mes, el segundo, el tercero, y hasta el noveno, sin llegar con alguna injerencia externa, lo que significa que matar a un recién nacido en su cuna y matarlo en el cigoto es lo mismo.
El aborto, por supuesto que es lo mismo, un asesinato, aunque lo hicieron legal, pero hay que precisar que una cosa es que la autoridad diga no te castigo por lo que hiciste y está mal, porque es un homicidio, y otra cosa es mandar el aborto.
Ningún gobierno manda el aborto, nada más dice no te castigo por lo que debería de castigar a un asesino, pero que peor asesina que la mamá que mata a su hijito inocente.
Por eso dicen “eres un conservador, y sí, hay que conservar la vida, no soy un destructor de la vida”.
Han dicho que hay que distinguir entre individuo y persona, persona es quien tiene la posibilidad de relacionarse con otras personas, individuo es el que no tiene esas capacidades.
Hay una serie de absurdos en el mundo actual.
"Hay una cultura, como dijo Juan Pablo II, de la muerte y yo estoy por la cultura de la vida”.
MATRIMONIOS IGUALITARIOS
En cuanto al matrimonio igualitario, indicó que el sexo se había entendido siempre como el origen de la vida, y ahora es el origen del placer, con quién quieras, cuando quieras, por donde quieras, como quieras.
¿Qué te da más placer? Hazlo. Pero es que dos lesbianas, dos homosexuales, no importa, son los sacrosantos derechos íntimos de la persona, por favor, hay un proceso.
Pero yo soy quizá un poco drástico, que digo no es que nos hayamos rebajado a nivel bestial, porque las bestias usan el sexo para engendrar, y ahora en la perversión sexual es sexo igual a placer.
La vida es igual a amor, y energía, amor y vida es lo mismo.
Entonces, Dios dijo quiero que seas mi imagen para que crees también tú por amor y, entonces, el sexo es la gran manifestación del amor fecundo.
Por eso, la perversión sexual no es bestial, está más abajo, porque las bestias saben cuándo aparearse.
Indicó que el hombre y la mujer son fundamentalmente iguales, pero funcionalmente distintos.
Reconociendo los derechos humanos al pleno y la dignidad igual del hombre y la mujer, la vida sólo nace del humano, y el humano no es ni el varón ni la mujer, sino ambos.
El derecho es la capacidad que se tiene para llenar una necesidad, el derecho a la vida es una necesidad que se tiene para llenar la capacidad de vivir.
En la actualidad todo se dice derecho y no se dice responsabilidad, porque en cada derecho debe haber la posibilidad de llenar la necesidad.
Ahora, llenar la vida entre dos lesbianas no la van a llenar, entre dos homosexuales no la van a llenar, no hay que complicarse, decir patrañas de curas, de la Edad Media para tener sujetos a los ignorantes, a la plebe, pero con cuidado, derecho es la capacidad de llenar una necesidad existente, desde el derecho comercial hasta el derecho íntimo vital, llenar una necesidad existente, de acuerdo al tamaño de esa necesidad que es lo que se llama justicia.
Entonces, los derechos deben ser justos para llenar una necesidad, y a un derecho hay una necesidad de responder.
El derecho que tiene dentro de uno mismo y el derecho en relación al que está enfrente de mí, tengo derecho a que tú me des tanto.
Derecho sin correspondencia o sin responsabilidad, derechos ficticios, en lugar de derechos son máscaras de destrucción, y el que tenga entendimiento que lo entienda.
EL GOBIERNO DEBE CONSTRUIR LA UNIDAD
Tenemos obligación de pedir por nuestros gobernantes para que podamos vivir en tranquilidad y paz.
Eso es el bien común, el gobernante no es el que tiene que darnos de comer, construir la carretera o poner esta institución, sino que tiene la obligación de poner la posibilidad, el ambiente de que nosotros los ciudadanos podamos construirnos.
Si en lugar de eso nos roban, se da la corrupción, los famosos huachicoleros, el crimen organizado, la extorsión al día, todo eso no da tranquilidad y paz, tenemos que pedirle a Dios nuestro señor que nuestro gobierno, el que sea, sea rojo, verde, amarillo, negro, nos dé capacidad para construirnos nosotros, no somos gente impotente, somos gente potente que tiene que construirse en individual y colectivamente.
Entonces, que no nos pongan obstáculos, que nos den la capacidad amplia de vivir en tranquilidad y paz, qué es la tranquilidad, es el orden, y qué es el orden, el orden es la apta disposición de lo par e impar.
El vivir en una Patria es tener la capacidad de juntar todas nuestras capacidades y no hacerlas que choquen una con otra, sino entre todos unirnos de manera que tengamos la paz y la tranquilidad, el bienestar, la unidad.
El Gobierno debe tener como objetivo construir la unidad, y no la división y la guerra.
“¿Qué me parece a mí el Gobierno? Pues Nuestro Señor dijo: por sus frutos los verán”.
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