En su calidad de ciudadanos, Juan Francisco Valerio Quintero, Rodolfo García Zamora, Gilberto del Real Ruedas, Rubén Méndez Félix, Pedro Padilla González y Francisco Javier Calzada Vázquez, piden que la obra del viaducto elevado en el bulevar metropolitano se consulte a la ciudadanía.
Señalan que desde hace algunos meses en Zacatecas surgió un debate público acerca de la posible construcción de dicha obra en un tramo de poco más de 3.6 kilómetros en el bulevar Adolfo López Mateos.
En este sentido, solicitan que se haga público el proyecto del viaducto elevado para el bulevar Adolfo López Mateos.
Además, que se establezca un amplio foro de discusión y análisis en el que se revisen los pros y contras de esta estructura.
Y que, en aras de una auténtica práctica de los principios de la gobernanza democrática, se lleve a cabo una consulta ciudadana cuyo resultado sea vinculante, como lo acaba de proponer el presidente Andrés Manuel López Obrador, con una participación de 30% y no del 40% como está establecido actualmente.
Pues esta vía representa para la ciudad de Zacatecas la mayor arteria de comunicación del centro de la ciudad con las principales salidas a otras ciudades, tanto del Estado como de los estados vecinos, alcanzando una afluencia vehicular de hasta tres mil vehículos por hora en las horas pico, y debido a la inexistencia de mejores vías de comunicación, sigue siendo la principal alternativa vial, aún con el alivio que significó la ampliación a cuatro carriles del libramiento a tránsito pesado.
Calzada Vázquez consideró que la consulta opera, pues, simultáneamente, como un mecanismo de resolución entre dos posiciones diametralmente encontradas, y como herramienta de gobernanza democrática.
Por su parte Valerio Quintero expuso que se debe analizar si está obra solamente trae beneficios a quienes tienen automóvil y no a los peatones.
Del Real cuestionó si este segundo piso es la mejor opción para mejorar la movilidad o si se pudiera analizar otra propuesta viable que no implique un costo tan elevado de más de tres mil millones de pesos, es decir, el 10% del presupuesto anual para el Estado.
Consideraron que hay otras medidas que pueden aliviar el tráfico en esa vialidad, como, por ejemplo, escalonar los horarios programando la entrada a lo que antes era Ciudad Gobierno, ahora llamada Ciudad Administrativa, para que miles de trabajadores ingresen media hora después.
Otra opción es sacar el paso del ferrocarril por gran parte de la zona conurbada, y buscar un transporte realmente eficiente como sería un tren ligero desde San Jerónimo en Guadalupe hasta el campus siglo XXI de la UAZ.
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