Debido al encarecimiento de las viviendas y a la búsqueda de mejores oportunidades laborales, aumentó el número de zacatecanos que optan por adquirir viviendas en estados vecinos, principalmente Aguascalientes.
Luis Antonio Martínez Muñoz, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi) y Susana Gallegos Alonso, miembro de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), coincidieron en que además del alto costo de los inmuebles, también influye la búsqueda de oportunidades laborales fuera del estado y –en años recientes- la violencia.
“Las ventas han disminuido porque mucha gente se va a otras ciudades a vivir, no tenemos un porcentaje exacto, pero cada año disminuye la venta y demanda de vivienda de Infonavit, hay quienes emigran a Aguascalientes a comprar ya sea una primera o segunda vivienda”, dijo en entrevista Martínez Muñoz.
Mencionó que el sector se ha visto gravemente afectado por las reglas del actual Código Urbano de Zacatecas y la escasez de terrenos adecuados, lo que elevó el costo de las viviendas, obligando a los desarrolladores a dejar de producir la denominada “vivienda económica”.
Las disposiciones del Código Urbano, reformado hace cinco años, obligan a los desarrolladores a ampliar las calles y el área de donación, lo que implica construir un menor número de casas por fraccionamiento haciendo menos redituable su edificación.
Mientras que antes de la reforma, en una hectárea se alcanzaban a edificar 60 viviendas, con el nuevo Código sólo caben 40.
Debido a lo anterior, los constructores dejaron de lado la producción de viviendas de interés social –cuyo costo oscila entre los 500 y los 600 mil pesos– y ahora “le apuestan” a las de más de un millón de pesos “para recuperar la inversión”.
Reconoció que estos costos sobrepasan la capacidad de crédito de la mayoría de los trabajadores que cotizan ante el Infonavit y que tienen bajos salarios.
“No nos vamos a arriesgar como desarrolladores a que se aprueben nuevos fraccionamientos con estas políticas porque es incosteable hacer viviendas, vamos lento pero parece que hay voluntad de modificarlo”, mencionó.
Bajos salarios
Susana Gallegos Alonso, miembro de la AMPI, coincidió en que los bajos salarios, y en parte, la inseguridad de años recientes, han provocado que disminuya la demanda de compra y renta de vivienda en Zacatecas.
“Hemos visto que ha migrado mucho zacatecano a Aguascalientes” afirmó la representante de los profesionales inmobiliarios, quien mencionó que la demanda de vivienda en dicha ciudad es “del interés medio para arriba”, es decir, no de viviendas económicas.
Mencionó que ha recibido invitaciones de desarrolladores de vivienda de Aguascalientes “para conocer algunos desarrollos; y nos buscaron porque ellos observan que los de Zacatecas prefieren irse para allá”.
Recordó que durante la pandemia por Covid-19, “aumentó el precio de los materiales para la construcción, aunque no precisamente aumentó el salario a los trabajadores” lo que ahora les impide construir o “costear una vivienda digna”.
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