Presenta gobierno de Zacatecas programa de austeridad

Juan Castro

  · martes 7 de agosto de 2018

El secretario de finanzas del estado de Zacatecas, Jorge Miranda lamentó que el programa de austeridad no se haya podido transmitir a los demás Poderes / Cortesía

Zacatecas, Zac.- “Tenemos la indicación de no patear el bote, nosotros no vamos a administrar los problemas”, señaló el secretario de Finanzas, Jorge Miranda Castro, quien agregó que los temas de austeridad, racionalidad y de calidad del gasto, llegaron para quedarse a Zacatecas, y se hicieron desde el 2016, pero para el 2019 “tenemos que apretarnos muy fuerte el cinturón”.

No ha habido nuevas plazas, se ha reducido el gasto por servicios personales, se han tenido incrementos en el renglón de servicios personales por la autonomía de la nueva Fiscalía, por esa transición de la creación de la nueva Fiscalía, donde se ha incrementado el número de Policías Ministeriales, también se ha incrementado sensiblemente el número de Policías Estatales”.

Queda claro que con ello no se va a resolver el clima de violencia, pero sí se sabe que la disuasión y el elemento de contención son muy importantes ante la nueva realidad que vive todo el país, porque todo el país está inmerso en este clima de violencia.

Indicó que se han tenido retiros voluntarios, un diagnóstico sobre la estructura orgánica, el análisis del tabulador de sueldos, ahorros en consumo de energía eléctrica, agua, servicios telefónicos, racionalidad en el material de oficina e insumos, y a partir de octubre de 2016 se tuvo el primer ajuste hacia la baja de los sueldos, el primero del cinco por ciento, y el segundo, anunciado en 2017 fue del 20 por ciento.

Dijo que “nos da gusto que un gobierno nacional que iniciará en los próximos meses trabaje de la mano con Zacatecas, porque Zacatecas desde el principio sabía lo que tenía que hacer”.

No se pudo extender a otros Poderes

Lamentó que el programa de austeridad no se haya podido transmitir a los demás Poderes, a los organismos autónomos, la necesidad imperante, esta exigencia ciudadana de que el gobierno debe trabajar de manera austeridad, con una gran racionalidad, y que ante la insuficiencia de recursos en que se llegó al gobierno, la encomienda fue cómo reducir ese déficit insostenible de cuatro mil millones de pesos que se había observado en 2014, en 2015 y en 2016.

La primera estrategia quedó plasmada en un decreto gubernativo que establecía una serie de medidas y lineamientos en materia de racionalidad, de austeridad y de calidad del gasto.

No se podía seguir recurriendo a la deuda para pagar gasto corriente, no se podía seguir financiando gasto recurrente generado de compromisos, sobre todo en materia de sueldos, salarios, aguinaldos y demás prestaciones con ingresos no recurrentes derivados de financiamientos.

Eso fue una gran barbaridad, y alguien con poquito sentido financiero sabría que eso lleva prácticamente al colapso económico.

Los objetivos para la permanencia en la calidad del gasto estaban envueltos en la austeridad, en la racionalidad y en la transparencia.

La estrategia presupuestal para disminuir el déficit era muy clara, se quedaron varios miles de maestros fuera en el proceso de centralización de la nómina, cuando nace el FONE y se elimina el Fondo de Aportaciones para la Educación Básica contenido en el Capítulo 5 de la Ley de Coordinación Fiscal.

Es en este momento donde se inicia con un proceso recurrente de déficit fiscal, es decir, se gastaba muy por encima de la disposición de ingresos.

El tema no era sólo educación básica, se empezó a observar de manera recurrente, en los organismos descentralizados,problemas financieros, y hoy se observa que COBAEZ y CECYTEZ traen problemas, las Universidades Tecnológicas y Politécnicas igual, aunque no en la misma dimensión, así como los Institutos Politécnicos Regionales, que trabajaban con un gran equilibrio presupuestal y hoy también en una dimensión diferente a la de educación básica, presentan también problemas, así como el Instituto de pensiones, al que se requiere de meter cirugía mayor en el corto plazo.

No se va a jugar en la lógica de posponer y diferir los problemas, queda caro que hay dos tipos de problemas, los que se pueden resolver se van a resolver en el momento inmediato, y los que no se van a administrar de manera apropiada.

No hay más lugar a la improvisación

No hay más lugar a la improvisación, hoy el secretario de Finanzas, el gobernador del Estado, tienen una camisa de fuerza, y no pueden darse el lujo de dormirse en sus laureles en Zacatecas.

Si no se consigue el recurso para la nómina educativa no se puede endeudar al estado, y se tiene la forzosa y urgente necesidad de conseguir el recurso a través de la gestión.

Si se hubiera hecho antes Zacatecas se hubiera ahorrado seis mil millones de pesos que hoy se tienen como una loza de deuda y que se tiene que enfrentar de manera responsable.

Gracias a las medidas que se tomaron en 2017 y 2018 Zacatecas ha venido evolucionando.