Las empresas Compañía Cervecera de Zacatecas, Exploradora de Sombrerete y Aeropuerto de Zacatecas, amparadas contra el impuesto de remediación ecológica perdieron el recurso legal y deberán pagar esta contribución desde 2017.
Al momento, los recursos de ese impuesto se encuentran encapsulados y el Poder Legislativo, en conjunto con el Ejecutivo, dispondrán el destino de los mismos.
En la sesión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) se trataron los asuntos respecto a la Compañía Cervecera de Zacatecas, Exploradora de Sombrerete, el aeropuerto de Zacatecas, además de que habían resuelto en el mismo sentido los casos de las mineras Peñasquito y Peñoles.
Se reclamó contra actos de la LXII Legislatura del Estado de Zacatecas y otras autoridades consistentes en la Ley de Hacienda del Estado de Zacatecas.
La resolución revoca la sentencia recurrida, se sobresee el juicio, la justicia de la unión no ampara ni protege a la quejosa y es infundada la revisión adhesiva.
En febrero de 2019, la SCJN determinó que el impuesto de remediación ecológica tenía sustento para el cobro en sus cuatro vertientes: remediación ambiental en la extracción de materiales y minerales; emisión de gases a la atmósfera; la emisión de contaminantes al suelo, subsuelo y agua; y depósito o almacenamiento de residuos.
La sala superior de la Suprema Corte determinó que el estado de Zacatecas no invadía las atribuciones federales.
El proceso de revisión a la Ley de Hacienda del Estado de Zacatecas en 2017 fue objetado por el Ejecutivo federal, aún en la etapa presidencial de Enrique Peña Nieto.
A partir de ahí, empresas grandes, las que debían de pagar más por estos conceptos, se ampararon para no pagar este impuesto, y desde 2017 se mantenía la expectativa de la resolución.
Los ministros de la Segunda Sala determinaron desechar los actos reclamados en los amparos en revisión.