Al cumplirse un mes de que estalló la huelga en la Minera Peñasquito, es grave la afectación económica que sufre la población de Mazapil, Zacatecas, tercer municipio con el mayor índice de marginación en la entidad.

La empresa, que en más de una década de operaciones se convirtió en la principal productora de oro del país - propiedad de la trasnacional estadounidense Newmont- es también la principal empleadora de la región norte del estado con cerca de cuatro mil trabajadores directos.

“La huelga se refleja con los comerciantes que sufren pérdidas (…) está detenida la economía, el sostén de la gente ha disminuido”, reconoció el alcalde de Mazapil, Mario Macías Zúñiga quien de manera personal dijo haber solicitado a delegados sindicales “sean más mesurados en sus demandas para que puedan llegar a un acuerdo”.

La principal demanda del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana, cuyo líder es el senador Napoleón Gómez Urrutia, es un aumento de la participación de los trabajadores en las utilidades, del 10% establecido en el Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) al 20%.

El pasado 3 de julio, el sindicato se reunió con representantes de la parte patronal y aceptó reducir su demanda a un pago equivalente al 16% de dicha prestación: “Para la empresa esta sigue siendo una demanda poco razonable”, expresó Newmont en un comunicado emitido al día siguiente.

“Afectación muy fuerte”:

El 75% de la proveeduría que requiere Peñasquito para su funcionamiento es local, lo que representan una derrama económica directa para cerca de 30 comunidades que brindan servicios y mercancías, informó José David Hernández, diputado de la región de Mazapil.

Entre los sectores más afectados están los de los transportistas, proveeduría de alimentos para el personal, talleres mecánicos que reparan maquinaria y vehículos y empresas proveedoras de gasolina y diesel.

Ha sido una afectación económica muy fuerte, está parado todo por eso es muy importante que la mina reabra, aunque para nosotros es más importante que prevalezca el derecho de los trabajadores.José David Hermández, diputado

Amenaza de migración

El legislador reconoce que la minería también es el factor que controló el fenómeno de la migración en el semidesierto zacatecano, pues los empleos bien pagados impidieron que muchos jóvenes buscaran oportunidades en otras partes del país o en Estados Unidos.

Mazapil, donde se encuentra Peñasquito, es el municipio con la mayor extensión territorial, aunque es de los que tiene menos habitantes. Tan sólo del 2000 al 2005, registró una caída del 13% de personas, pasando de 17 mil 860 a 15 mil 589.

Tras la apertura de Peñasquito, en el año 2010 se registró un aumento de la población; tan sólo cinco años después casi se restituyó por completo la población que se tuvo a inicios de siglo, con 17 mil 457 habitantes en el año 2015 de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

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“Hace una década (la migración) era bastante, con lo de Peñasquito y con Orla Camino Rojo y con Tayahua se ha detenido”, comentó el presidente municipal de Mazapil.

Reconoció que, de registrarse un cierre definitivo de la actividad minera, la afectación sería tal que volvería el fenómeno migratorio a los Estados Unidos, y a los estados vecinos de Coahuila y Nuevo León. Explicó que los empleos los genera “casi nada más la minería, empleos de otra cosa no hay”.

Mazapil es el tercer municipio con el mayor grado de marginación de Zacatecas, de acuerdo con estadística del Consejo Nacional de Población (Conapo), al presentar un índice de marginación del 53.90%, mientras que el del estado es del 19%.