Zacatecas, Zac.- El mandatario estatal, Alejandro Tello, aceptó que la realidad de Zacatecas en materia de seguridad hídrica es crítica, ya que 75 por ciento del agua potable es subterránea; hay una precipitación anual de 455 milímetros, la cual es baja; 43 por ciento del agua ya está asignada; 86 por ciento es para el sector agrícola y de los 34 mantos acuíferos, 14 están sobreexplotados.
En este contexto, el mandatario convocó a los integrantes de la Red Mexicana de Afectados por la Minería (Rema), quienes se oponen a la construcción de la presa Milpillas, a participar en una mesa de diálogo pública, de frente a los zacatecanos y juntos alcanzar acuerdos.
El gobernador reiteró su convocatoria a Miguel Ángel Mijangos Leal, dirigente de la Red, para dialogar, llegar a acuerdos y no condenar a Zacatecas a la cerrazón de intereses ocultos. "Milpillas no es para Grupo Modelo, es para ustedes y sus hijos; los gobiernos somos pasajeros, busquemos puntos de encuentro".
El Gobierno de Zacatecas, organizaciones internacionales y la iniciativa privada unieron esfuerzos para impulsar un proyecto sustentable, que contribuya a mejorar la seguridad hídrica de la entidad, mediante la creación de un Fondo de Agua.
"Sí al Fondo de Agua, porque urge emprender acciones para brindar soluciones ecológicas al reabastecimiento de los mantos acuíferos y ojalá no se condene a Zacatecas a la cerrazón y los intereses ocultos de algunos actores, planteó el Gobernador Alejandro Tello, durante su mensaje, además de insistir en la necesidad de construir el sistema Milpillas.
"El cuidado del agua es una corresponsabilidad entre instituciones públicas, privadas y la sociedad; hago un exhorto para que todos nos sumemos en la búsqueda de soluciones mediante un diálogo abierto, transparente y ajeno a intereses políticos que sólo buscan frenar el desarrollo de Zacatecas", agregó.
El titular el Ejecutivo aseguró que para él son bienvenidas todas las sugerencias, por lo que lamentó que haya opositores a proyectos como Milpillas, entre los que se encuentran la organización Rema, cuyos integrantes no han presentado propuestas, ni mucho menos han dado la cara.