“Estamos desesperados y muy cansados, ya nos rebasó el alto flujo de pacientes”, declaró una médica de la Unidad de Especialidades Médicas (UNEME Covid) de la Secretaría de Salud de Zacatecas (SSZ) al denunciar el déficit de personal que hace frente al actual repunte de la pandemia.
La trabajadora, quien pidió permanecer anónima por temor a represalias, informó que desde hace más de dos semanas fue sobrepasada la capacidad de doctores y enfermeras de la Unidad médica, la cual está por alcanzar el cien por ciento de ocupación.
La jornada del pasado lunes cerró con 55 de las 60 camas ocupadas; sin embargo, ya se encuentra al cien por ciento el área de terapia intensiva conformada por 34 camas con ventilador.
En entrevista señaló que están por habilitarse más camas en otras áreas “pero el problema es que no se aumenta el número de trabajadores”.
El repunte de contagios, la modificación en los lineamientos para trabajadores con contrato del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), y la cuarentena de médicos y enfermeras contagiados, provocaron la mayor crisis que se ha vivido en la UNEME desde que inició la contingencia:
La verdad es que nunca nos habíamos visto rebasados de esta manera, ni siquiera en las primeras olas de la pandemia (…) el flujo de pacientes está siendo excesivamente elevado.
También pidió que las autoridades atiendan las demandas de los médicos y que den a conocer la situación real de la pandemia: “Queremos que nuestras autoridades hablen con franqueza a la población, el hospital está al límite”.
Sobreexplotación y baja calidad en la atención
Cada médico en terapia intensiva atiende en promedio ocho pacientes críticos intubados, cuando la norma federal dicta que no deben ser más de seis. A cada enfermera le tocan cuatro pacientes intubados o hasta más de seis pacientes no críticos.
Los nuevos lineamientos del Insabi que se aplican este año, marcan que cada trabajador debe cumplir turnos de ocho horas, cinco días por semana, y los dos días de descanso deben ser entre semana, no en sábado y domingo como se hacía anteriormente.
De esta forma se eliminó la jornada acumulada que era cubierta por trabajadores contratados para sábado y domingo. Este cambio no ha funcionado en la UNEME porque la capacidad de la plantilla no alcanza para rotar turnos de esa forma.
Ansiedad y depresión en el personal médico
La denunciante aclaró que ninguno de sus compañeros se ha negado a atender a los pacientes que llegan: “sí sacamos el trabajo, pero sin la calidad de atención que se debería de brindar porque son muchos enfermos para muy pocos médicos”.
Informó que a estas altura la mayoría del personal de la UNEME atraviesa trastornos como depresión, ansiedad y síndrome de burnout: “Eso habla de la sobrecarga de trabajo que estamos atravesando y como tal la sobrecarga emocional que llevamos desde hace dos años”.
Los lineamientos federales dictan que el personal de áreas Covid debería recibir constante atención de salud mental y eso no ha pasado, agregó.
Además, la mayoría de los médicos son eventuales y no tienen derechos laborales ni acceso a ninguna prestación como vacaciones o permisos.
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