Este domingo 27 de octubre, debido al término del horario de verano, se retrasaron los relojes una hora, lo que, de acuerdo con expertos en salud mental, tiene consecuencias en el estado de ánimo y en el rendimiento laboral y escolar.
También se ha demostrado el aumento de trastornos en el sueño, aumento de la somnolencia y el desajuste de los ritmos biológicos que forman parte de la fisiología normal de los humanos.
El psiquiatra, Víctor Manuel Aguilar Soria mencionó que en el cerebro existe una especie de interruptor conocido como sistema reticuloactivante regido por la luz del sol, la cual durante la temporada invernal tiene una menor duración.
El experto explicó que el sistema cerebral está interconectado con el sistema solar y los ciclos de la luna; lo cual puede ser observado con la influencia que tienen los astros en ciclos como el de las menstruaciones, los partos y las crisis convulsivas.
En entrevista advirtió que las personas que sufren enfermedades crónicas sufren más los efectos del cambio de horario: los hipertensos ven elevarse sus índices de presión arterial y los diabéticos tienden a incrementar sus niveles de azúcar en sangre.
El experto lamentó que los cambios de horario son una muestra de las políticas públicas que se enfocan más en cuestiones económicas en lugar de priorizar el bienestar de la población.
Apuntó que en invierno incrementan también los casos de depresión debido a su relación con las condiciones climatológicas y las celebraciones propias del fin de año.
LOS NIÑOS, PODRÍAN SER LOS MÁS AFECTADOS: ÁLVAREZ CRESPO
Osvaldo Álvarez Crespo, psicólogo e investigador de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), señaló que los niños son los más susceptibles de resentir los efectos del cambio de horario, afectando su rendimiento escolar.
Mencionó que el cerebro tiene un sistema que ya está establecido por la costumbre, por lo que le cuesta mucho trabajo acostumbrarse al cambio. Consideró que la mayoría de las personas tardan entre tres semanas y un mes en adaptarse.
“Es mayor el impacto en los niños: se les hace cortito el día, su cerebro recibe la señal, desde las seis de la tarde, de que se tienen qué dormir y eso para ellos es un tanto pesado”.
Exhortó a los padres de familia a que replanteen las rutinas, las horas de hacer la tarea y sobre todo no descuidar la alimentación:
“Debemos procurar que el niño desayune antes de irse a la escuela, sabemos que la hora del lonche es a las 10:30 de la mañana y eso representa más de 12 horas de ayuno, ya que el último alimento del día anterior se toma alrededor de las ocho de la noche”.
El también director del Centro de Crecimiento Humanista, expresó que para que el cerebro funcione bien en la mañana necesita alimento, glucosa y una buena ingestión de líquidos:
“Un cerebro deshidratado no funciona, provocando la falta de sueño que redunda en el estado de ánimo, la poca atención en el aula y su bajo aprovechamiento”.
BENEFICIOS ECONÓMICOS Y AMBIENTALES
El cambio de horario se implementa en México desde 1996 con el objetivo principal de ahorrar energía eléctrica haciendo un mejor uso de la luz natural.
Durante los meses de verano, sobre todo en las regiones y países más alejados del ecuador, hay una acentuada diferencia entre las horas de sol y las noches, debido a la inclinación de la tierra; es decir, amanece más temprano y el Sol se oculta más tarde.
Según información publicada por el Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica (Fide), además de los beneficios económicos, se incentiva la adopción de medidas para racionalizar el uso de la energía y reducir la vulnerabilidad de la población y los ecosistemas del país frente a los efectos adversos del cambio climático.
Durante el Horario de Verano del año pasado, se alcanzó un ahorro de energía eléctrica en consumo de 941.019 Gigawatts-hora, equivalentes al consumo de 589 mil casas habitación durante un año. En términos económicos, se estima que la aplicación del Horario de Verano dejó un ahorro de mil 393 millones de pesos.
Además, se evitó la emisión a la atmósfera de 548 mil toneladas de bióxido de carbono, principal causante del efecto invernadero, equivalente a un millón 198 mil barriles de petróleo. Estas cifras incluyen los ahorros obtenidos en los 33 municipios de la franja fronteriza norte, que adoptan el Horario de Verano el segundo domingo de marzo y concluyen el primer domingo de noviembre.
Cabe señalar que el cambio de horario aplica para toda la República Mexicana, salvo los estados de Sonora, Quintana Roo y los 33 municipios de la franja fronteriza norte (Baja California).
La instrucción es retrasar el reloj una hora el sábado por la noche para iniciar a tiempo las actividades del domingo.
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