Cicero Moraes, diseñador gráfico que se hizo famoso por hacer la reconstrucción facial del rostro de San Antonio de Padua, realizó la reconstrucción del rostro de los “Tres mártires de Kosice”, los misioneros católicos que fueron asesinados durante un levantamiento protestante en Hungría en 1619. A los tres mártires los canonizó Juan Pablo II en 1995.
La arquidiócesis de Kosice encargó al diseñador gráfico la reconstrucción para conmemorar el 400 aniversario del martirio.
¿Cómo realizaron la reconstrucción?
“El arqueólogo Jiři Šindelař y su equipo produjeron una serie de fotografías de los cráneos de los mártires, las fotografías se enviaron a una computadora que las convirtió en objetos 3D, correspondientes al volumen del cráneo. Con este cráneo 3D comenzaron a procesar la reconstrucción facial”.
El diseñador usó alfileres como marcadores y modeló los músculos principales alrededor de las caras de los mártires para así descubrir sus principales rasgos faciales.
El resultado final muestra que los rostros son 90 por ciento cercanos a la realidad de cómo eran los mártires, aunque lo más complicado fue obtener el color de ojos y cabello, ya que para eso se necesitaría un análisis especial de ADN.