El largometraje “Virgen de San Juan, cuatro siglos de milagros” ya llegó a Netflix, centrado en la historia y misticismo en una de las advocaciones marianas más visitadas de México, la virgen de la Inmaculada Concepción de San Juan de los Lagos que fue elaborada en Pátzcuaro, Michoacán a mediados del siglo XVI y que adquirió fama como milagrosa a partir del año 1623 en todo lo que era el virreinato de la Nueva España.
Esta historia de fe, devoción y drama retrata una de las tradiciones religiosas con más arraigo en el país, presentando la historia de la familia Hernández, y su vida después de que Gaby, la hija más pequeña de la familia cae enferma, con un tratamiento complicado y una cura casi imposible.
En un acto de fe, los abuelos de Gaby, Benita y Jerónimo peregrinan a San Juan de los Lagos para pedirle a la milagrosa virgen por la salud de su nieta. En el camino, la familia descubre la historia de la Virgen de San Juan y transforma radicalmente a todos los que deciden buscar el auxilio de la imagen.
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La película que tiene una duración aproximada de dos horas, es obra del productor Francisco “Chisco” Javier Pérez y la dirección de Noé González, quienes afirman que la historia busca realzar los testimonios de amor y fe, reuniendo los cuatro siglos de milagros que se han gestado en San Juan de los Lagos.
La cinta se grabó en San Juan de los Lagos, Cañadas de Obregón, Jalostotitlán, Guadalajara, Pátzcuaro y Tultepec.
Zacatecas y la Virgen de San Juan
La relación de la Virgen de San Juan de los Lagos con los zacatecanos es larga y llena de amor.
Desde 1623 se realiza de forma anual la tradicional peregrinación desde distintos puntos del estado. Originalmente la peregrinación era a pie, partiendo del entonces Real de Sombrerete, tal vez en carreta o a caballo, partiendo del Templo de San juan de Dios.
Iniciaba el 22 de noviembre para llegar a la fiesta del ocho de diciembre, realizando varias escalas que se han hecho obligadas y tradicionales, en cada una, los peregrinos son recibidos por la gente del lugar que a manera de ofrenda, regala alimentos y bebidas. Los peregrinos descansan, duerme y por la mañana asisten a misa o rezan el rosario antes de continuar su camino.
La peregrinación ha cambiado con el tiempo, se ha popularizado asistir en bicicleta y acompañarse de camionetas o camiones, sin dejar de lado la tradición de llegar a pie.