Los arqueólogos de la antigua ciudad romana de Pompeya, cerca de Nápoles, han descubierto dibujos a carboncillo realizados por niños de apenas seis años en los que se representan peleas violentas de las que posiblemente fueron testigos.
Los bocetos de figuras de gladiadores se descubrieron durante las excavaciones realizadas en los últimos meses en Pompeya, una próspera ciudad que fue destruida por la erupción del Vesubio hace casi dos mil años.
Los arqueólogos también hallaron los contornos de tres manos pequeñas, dos figuras jugando con una pelota, una escena de caza posiblemente protagonizada por un jabalí y dos luchadores, uno de los cuales yace tumbado en el suelo.
El director del yacimiento, Gabriel Zuchtriegel, dijo que los dibujos lineales, hallados en la pared de una casa conocida como "Cenáculo columnado", fueron realizados probablemente por niños de seis o siete años.
Psicólogos de la Universidad Federico II de Nápoles creen que los dibujos representan acontecimientos de los que los niños fueron testigos, más que imaginarios.
"En Pompeya, incluso los niños más pequeños estaban expuestos a una violencia extrema entre humanos y entre humanos y animales en las arenas del anfiteatro de la antigua ciudad", afirmó Zuchtriegel.
Otros descubrimientos de esta semana fueron un retrato único de un niño encapuchado con un pequeño perro a sus pies, hallado en el llamado "Taller de pinturas".
A la entrada de esa casa se descubrieron los esqueletos de un hombre y una mujer, una pareja de ancianos que probablemente se había refugiado en vano de la piedra pómez y la ceniza que inundaron rápidamente la ciudad durante la erupción volcánica.
El mes pasado, las autoridades de Pompeya sacaron a la luz un comedor de paredes negras con pinturas inspiradas en la guerra de Troya, mientras que en marzo se desenterró una obra que arrojó luz sobre las antiguas técnicas de construcción.