El gobierno británico actuá con lentitud para limitar el impacto del cambio climático, considera el miércoles una investigación realizada por un comité independiente, que pide al gobierno adoptar un "mejor plan de acción".
"Las medidas tendientes a mejorar la resiliencia de la nación no logran seguir el ritmo de los impactos del calentamiento del planeta y los riesgos climáticos crecientes a los que el Reino Unido está confrontado", advirtió el Comité sobre el Cambio Climático (CCC).
Tras haber interrogado a 450 expertos de 130 organizaciones, este comité independiente concluyó que el gobierno debe "aumentar sus esfuerzos".
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Ahora que el país recibirá en noviembre en Glasgow la conferencia mundial sobre el clima COP26, el Primer ministro Boris Johnson "debe presentar un mejor plan de acción" para preparar al Reino Unido al cambio climático e "integrarlo en todos sus proyectos y políticas" futuras, recomendó el comité.
Desde los años 1990, el nivel del mar subió 16 cm en el Reino Unido, señala el informe para ilustrar la gravedad de la situación, mencionando más de cuatro mil muertes relacionadas con el calor desde 2018 en Inglaterra" o inclusive el hecho de que la temperatura media de la atmósfera se calentó en 1,2 C° con relación a su nivel de la era pre-industrial.
"La gravedad de los riesgos a los que estamos confrontados no debe ser subestimado", advirtió la presidente del comité, Julia King, quien consideró "ahora esencial y urgente instalar un plan de acción detallado y eficaz para preparar al Reino Unido al cambio climático".
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En su informe de mil 500 páginas, el CCC clasifica 60% de los riesgos examinados como muy urgentes y llama la atención del gobierno sobre ocho categorías de riesgo que requerirían su "atención inmediata" en los próximos dos años.
El CCC identifica de esta manera "una serie de medidas que tendrán efectos benéficos en los cinco próximos años si son aplicadas a gran escala", como la modernización de edificios, la creación de hábitats respetuosos del medio ambiente y la mejoría del acceso a las informaciones sobre los impactos climáticos.
Anfitrión del G7 la semana pasada, el Reino Unido y las seis otras potencias industrializadas presentes en la cumbre ya fueron fuertemente criticadas por asociaciones por falta de ambición en sus proposiciones en materia climática, y Greenpeace denunció un "plan que no está a la altura".
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