Cohete espacial explota después del despegue

Segundos después del despegue, el cohete se convirtió en una bola de fuego

AFP

  · miércoles 13 de marzo de 2024

Space One dijo en un comunicado que había decidido "anular el vuelo" y que abrió una investigación de lo sucedido / Captura de pantalla

Un cohete de una empresa privada japonesa explotó el miércoles segundos después de iniciar su despegue en el oeste del país, un espectacular fracaso en los intentos de la compañía de colocar un satélite en órbita.

La misión de la empresa emergente Space One tenía como objetivo colocar en órbita un satélite del gobierno japonés, algo inédito para la industria privada aeroespacial del país.

El cohete "Kairos", de 18 metros de altura, despegó a las 11:01 desde el centro de lanzamiento de Space One en la península de Kii, una zona montañosa y boscosa en la prefectura de Wakayama.

Pero segundos después del despegue, el cohete se convirtió en una bola de fuego y una espesa humareda envolvió la instalación, con restos del aparato cayendo por las pendientes de las colinas de alrededor, según imágenes divulgadas en vivo.

Space One dijo en un comunicado que había decidido "anular el vuelo" y que abrió una investigación de lo sucedido.

"Queremos aceptar este resultado con visión de futuro y emprender nuestro próximo desafío", declaró a periodistas el presidente de la empresa, Masakazu Toyoda. Insistió en que Space One no utiliza la palabra "fracaso".

La firma desea "contribuir con la expansión de los servicios espaciales" mediante lanzamientos satelitales exitosos con sus cohetes, agregó.

Escombros en llamas cayeron en los alrededores, donde se activaron los rociadores de agua, en escenas dramáticas vistas por cientos de espectadores que llegaron a las áreas de observación pública.

Empresas privadas como Space One desempeñan un papel de importancia creciente en la exploración espacial mundial.

En febrero, una empresa de Houston posó la primera nave espacial estadounidense en la Luna en más de 50 años, y la NASA depende cada vez más de los cohetes fabricados por SpaceX, de Elon Musk.

Pero abundan los fracasos. El año pasado, otra empresa emergente japonesa, ispace, intentó en vano convertirse en la primera compañía privada en posar en la Luna.

La empresa dijo que perdió el contacto con su nave en lo que calificó como un "aterrizaje forzoso".