Con éxito se llevó a cabo la tradicional corrida de feria anual del municipio de Río Grande, Zacatecas, tarde en la que se cortaron cinco orejas y un rabo, que generaron los triunfos de los matadores de a pie Esaú Fernández, de España, y del mexicano, Sergio Flores, que abrieron la puerta grande y salieron a hombros de los aficionados.
La plaza portátil que se estructuró para dar paso a este festejo taurino, registró tres cuartos de entrada, escenario en el que se lidió un ejemplar de Bernaldo de Quiroz, además de cuatro de la dehesa de Arturo Gilio y uno más de regalo de la ganadería de la Playa.
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Cuauhtémoc Ayala fue el rejoneador que salió por delante, quien le hizo frente al toro de Bernaldo de Quiroz, que se prestó en términos generales, para la faena desde los rejones de castigo hasta la hoja del peral, por lo que cooperó para que el diestro de a caballo lograra la primera oreja del festejo.
Esaú Fernández, con el primero de su lote, logró un apéndice, luego con su segundo enemigo fue aplaudido, regaló un toro, de la divisa de La Playa, de muy buenas condiciones al que le cortó las dos orejas y el rabo.
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El diestro originario de Tlaxcala, en este caso Sergio Flores, cuajó un trasteo muy meritorio, tanto con el capote, como con la franela, que redondeó con una buena estocada, labor que le fue premiada con dos orejas, por parte del juez de plaza, con las que dio la vuelta al anillo ante el entusiasmo de la gente.
De esta manera tanto Esaú Fernández, como Sergio Flores, salieron a hombros de los aficionados, por la puerta grande la plaza portátil.