Zacatecas, Zac.- Mineros fue goleado, humillado y exhibido ensu visita al estadio Miguel Alemán Valdez en Celaya, Guanajuato,tras caer 5-1 ante Celaya.
El cuadro zacatecano lució irreconocible la noche de ayer, anteun Celaya que hizo lo que quiso ante un rival sin nada queofrecer.
El encuentro arrancó con intensidad de parte de los locales,que no tardaron en superar a una defensiva de Mineros que lucíadormida, y a los siete minutos de acción cayó el 1-0 a manos deAndrés Vergara que cerró una diagonal “matona”.
Zacatecas parecía desconcertado, y cuando parecía que podíareaccionar, Alfredo Moreno definió el 2-0 frente a Torgnascioli atan sólo 28 minutos de juego.
La fiesta de Celaya apenas comenzaba y cuatro minutos despuésliquidaban el partido con gol de Carlos Alvarado, que aprovechólos errores defensivos para convertir.
El encuentro estaba 3-0, el cuadro rojo completamentedesaparecido, bajó moralmente y con una apatía terrible. Por loque seis minutos después los Toros se burlaban de la defensazacatecana y anotaban el 4-0 en tan sólo 38 minutos deactividad.
El primer tiempo terminó y la campana salvó a Zacatecas, quetenía como meta no recibir más goles en el segundo tiempo. Puesel equipo no mostró nada, ni carácter ni personalidad paraaguantar la situación.
El segundo tiempo fue de trámite para los locales, pues el“Mineirao” fue incapaz de reaccionar y de mínimo aguantar elcero atrás.
Avanzaron los minutos y nada de los zacatecanos, algunosfallidos intentos pero sin nada de nada.
Pero por si fuera poco la defensiva volvió a mostrarvulnerabilidad al final del encuentro, y falta de cinco minutos delfinal Rafael Murguía remataba de “Sombrerito” para poner unhumillante 5-0 al marcador.
El ingreso de Laínez le volvió a cambiar la cara a Zacatecas,y tras un desborde, Roberto Nurse de “taquito” hizo el gol dela honra y anotó el 5-1 definitivo a los 90 minutos.
Mineros no pasó la gran primera prueba del torneo y fue goleadogarrafalmente, deja el liderato y tendrá una larga semana, pues loexhibido en Celaya deja dudas, desconcierto y enojo de la aficiónzacatecana.
