Al menos 80 mil aficionados podrán vivir de cerca, por segundo año consecutivo, la experiencia de la NFL en México, y no hay mejor escenario posible que el histórico estadio Azteca.
Si bien los jerseys de Raiders y Patriotas llenarán el Coloso de Santa Úrsula, las 30 franquicias restantes también tendrán representación con el incomparable apoyo de los fans mexicanos.
El décimo encuentro de la liga en el país, que es el tercero de temporada regular, promete un agarrón entre dos de los favoritos en la Conferencia Americana. Será un gran platillo el que podrán disfrutar en la capital. Así como lo recomendó la propia NFL, es otra gran oportunidad para corregir los puntos negros que dejó la primera edición.
Aún se recuerda del año pasado el famoso láser que incomodo a Brock Osweiler, quarterback de Houston, los avioncitos cayendo al emparrillado y el grito homofóbico cada vez que los jugadores de Texanos realizaban una patada den despeje. Ese colorido mexicano no fue visto de buena forma por la liga estadounidense y han hecho el primer llamado a modificarlo. Quizás el último.
Todavía se tiene asegurado un partido más para el 2018, pero la renovación por seguir contando, y por qué no, aumentando el número de enfrentamientos en territorio nacional, está en el aire. Patriotas, Raiders, mascotas, porristas, aficionados y todas las partes de este gran evento, tendrán una tarde magnífica en la Ciudad de México para aumentar la efervescencia por la NFL en el país.