El Día Mundial de la Poesía, se celebra cada año el 21 de marzo, conmemora una de las formas más preciadas de la expresión e identidad y lingüística de la humanidad.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) adoptó por primera vez el 21 de marzo como Día Mundial de la Poesía durante su 30ª Conferencia General en París en 1999, con el objetivo de apoyar la diversidad lingüística a través de la expresión poética y fomentar la visibilización de aquellas lenguas que se encuentran en peligro.
“El Día Mundial de la Poesía es una ocasión para honrar a los poetas, revivir tradiciones orales de recitales de poesía, promover la lectura, la escritura y la enseñanza de la poesía, fomentar la convergencia entre la poesía y otras artes como el teatro, la danza, la música y la pintura, y aumentar la visibilidad de poesía en los medios”, según la UNESCO.
El Día Mundial de la Poesía coincide con el equinoccio de primavera en el hemisferio norte y con el de otoño en el sur, cuando los días son iguales a las noches en toda la Tierra porque el Sol está sobre el ecuador.
La poesía zacatecana
Uno de los poetas más importantes de México es el jerezano Ramón López Velarde, que en sus líneas destaca la poesía nacionalista y de exaltación a México.
Para el escritor, editorialista, académico y especialista en poesía mexicana moderna Guillermo Sheridan, Ramón López Velarde fue un escritor multifacético, que desde que empezó a escribir, trató de crear sujetos verbales que no son solamente una proeza expresiva, sino también el mapa perfectamente realizado de la forma en la que una conciencia se relaciona con el mundo.
Uno de los textos más conocidos y reconocidos de López Velarde es “La Suave Patria”, libro en donde cada imagen y cada verso son una declaración de amor a la patria.
Entre sus obras se encuentran los libros “La sangre devota” y “Zozobra”; algunos cuentos como “Luna de miel” y “El obsequio de Ponce”; la crónica “Dolor de inquietud”, así como sus ensayos políticos y diversos poemas que fueron recopilados en libros póstumos como “El minutero” y “Son del corazón”. Ramón López Velarde falleció el 19 de junio de 1921, sus restos mortales descansan en la Rotonda de las personas ilustres.