Con el propósito de “llevar el arte a todas partes” la artista zacatecana Araceli Quezada, innova en una colección de piezas que ha convertido en accesorios y cosas utilitarias, pasando del lienzo a nuevas superficies.

La idea surgió a raíz de la pandemia por Covid-19, con la intención de comercializar el arte de diferente manera, sobre todo en redes sociales; ahora, interviene con óleo y acrílico sombreros, macetas, jarras y accesorios para el hogar, que se caracterizan por ser pintados a mano a través de su marca “Mima”.

Plasmando diversas técnicas logra imprimir sus obras en distintos objetos que han sido bien recibidos por el público, y que vende a precios más accesibles que un cuadro.

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El arte figurativo, por ejemplo, lo propone en sombreros de distintos colores, que además de contar con un certificado de autenticidad, son piezas únicas e irrepetibles.

Como un complemento a sus producciones tradicionales en los lienzos, por el momento ya planea dos nuevas exposiciones pictóricas en Zacatecas y en Aguascalientes, en colaboración con otros artistas.

Asimismo, anunció que ya retomó sus actividades en el taller que dirige “Artemundo”, en donde imparte clases a niños, jóvenes y adultos, de dibujo y pintura.

Jardín del arte

Como parte de sus nuevos proyectos, Quezada informó que próximamente se desarrollará en Zacatecas el Jardín del Arte, actividad permanente que consistirá en que los artistas pinten y oferten su obra desde algún espacio público de la ciudad.

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La idea, adelantó, es que como sede se tenga el Parque Sierra de Álica y se promueva a través de eventos familiares para que la gente conozca el trabajo, los diferentes lenguajes y estilos artísticos del talento local, además de fomentar el coleccionismo.

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