Zacatecas, Zac.- “Quiero tocar la sensibilidad del público y dejar huella”, compartió Corina Ramírez, artista plástica quien figura por su trabajo en la pintura y la gráfica, pero también como una mujer preocupada por generar espacios de formación a través de la gestión cultural, quien este año celebra tres décadas dentro del arte.

Originaria de Nayarit, Corina se interesó por el arte desde pequeña, “siempre andaba con un crayón dibujando y recortando todo; era la expresión de una niña” recordó con alegría.

Proveniente de una familia apasionada por los recintos museísticos, a los ocho años de edad sus padres la llevaron a conocer Bellas Artes en donde había una exposición de Rafael Coronel, por lo que confesó que una de sus grandes influencias fue el artista zacatecano.

Recuerdo un personaje medieval con un sombrero enorme y claroscuro, esa imagen me persiguió con muchas inquietudes hasta que tomé conciencia en la adolescencia de que quería ser pintoraCorina Ramírez

Tras una amplia formación que incluso la llevó a formarse desde lo empírico hasta la profesionalización, cursó la licenciatura en Desarrollo Cultural, y fue directora del Consejo Estatal para la Cultura y las Artes.

Por el momento, y en el marco de sus 30 años de producción, expone su obra de manera individual “Retrospectiva” en la Casa Municipal de Cultura de Zacatecas, en donde muestra diferentes técnicas.

Se trata de 60 piezas que logran una exhibición coherente técnicamente; “yo trabajaba con más color y una pincelada muy fuerte, pero cuando empiezo a grabar el misticismo influyó en mi pintura”.

Aunque en los últimos años se ha desarrollada en la figuración –que no ha dejado totalmente- cada día está a un paso más de la abstracción, con una propuesta sutil que refleja sus principios.

“Todo mi mundo gira en torno al principio femenino, porque es el origen de la vida, está presente en la naturaleza y en el hombre, es el creador de todo”.

Una de sus obras representativas es “Agua mala”, que simboliza una medusa que flota en el mar, en donde la artista hace juegos en relación sobre cómo se estigmatiza a la mujer.

Al reconocer que Nayarit es rico en tradiciones, pero en donde no hay formación artística, Corina está en constante lucha para generar espacios para las nuevas generaciones y gestionar apoyos para los nuevos artistas.

Actualmente encabeza el taller de grabado Peyote Azul, y recientemente fue parte del encuentro de grabadores Zacatecas - Nayarit. Como parte de sus próximos proyectos pretende que “Retrospectiva” se exponga en algunos otros estados de la República Mexicana.

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