El Rincón de Parangueo es una comunidad del municipio Valle de Santiago, Guanajuato, y sitio que alberga una de las siete luminarias de la región. El túnel, como coloquialmente se conoce, es uno de los lugares más visitados tanto por los vallenses como paseantes por ser uno de los cráteres más emblemáticos de la zona.
Este bello lugar ubicado a sólo seis kilómetros de la ciudad cuenta con el único de los cráteres de un volcán inactivo al que se accede a través de un túnel artificial, de aproximadamente 450 metros de longitud, con lo que se vive una experiencia única al atravesar la montaña por su interior.
El cráter es un desierto salitroso de 1.5 km de diámetro y a los costados tiene vegetación de bosque tropical, siempre hace calor al interior porque con el paso de los años se generó un microclima que llega a los 22 grados centígrados. En las orillas, con el salitre se forman los que parecen fragmentos de hielo, unos accidentados laberintos que bordean un extraño lago que agrega un toque más enigmático al sitio, es como estar en otro planeta.
Poco a poco se ha convertido en el lugar preferido para mucha gente, sobre todo para aquellos que gustan de visitar lugares tranquilos y pasar una tarde amena alrededor de tu familia y amigos. Por ello personas de las ciudades cercanas como Salamanca, Irapuato y Huanimaro, entre otras, se desplazan hasta este volcán para tener una sana convivencia.
Entre semana llegan alrededor de 40 familias por día, sin embargo, el fin de semana el número se eleva hasta 150, a las cuales los habitantes reciben y la historia del sitio.
El lago-cráter es enigmático, de muy singular presencia, y en su interior se cultiva el mosco, insecto que es exportado a países como Alemania como alimento para aves. El agua es de un alto contenido en salitre, motivo por el cual no es utilizada para el riego, pero nos trae una peculiar leyenda, mezcla de mito y realidad.
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Además, los petroglifos son pinturas rupestres consideradas un tesoro realmente importante para esta comunidad y todavía quedan y son visibles varios de los originales.
Si te gusta montar a caballo, recorrer esta belleza natural sobre estos animales es posible. No dudes que saldrás en comunión contigo y con la naturaleza. Ah, y si te da hambre, en el pueblo podrás encontrar varias opciones de antojitos.
Conoce la leyenda de Rincón de Parangueo
En torno a Rincón de Parangueo existe una leyenda, sobre un mozo de hacienda que fue enviado por su patrón para que investigara si el agua de la laguna era apta para regar sus cultivos.
El mozo fue por una muestra de agua de La Hoya para ser analizada posteriormente; sin embargo, en su camino de regreso se embriagó y perdió la jícara que contenía el agua.
Para reparar la falta, el mozo compró otra jícara y la llenó de agua de la zona; cuando entregó el líquido a su patrón éste se mostró feliz de saber que el agua era apta para regar sus cultivos.
Para trasladar el agua de La Hoya, el hacendado mandó a construir un túnel y mucha fue su sorpresa cuando al iniciar el riego de sus tierras descubrió que el agua era salada.
El mozo avergonzado decidió suicidarse; su cuerpo fue hallado en el túnel que su patrón había mandado a construir. La leyenda cuenta que su sangre se mezcló con las aguas de La Hoya, la cual se tiñe de color rojizo cuando presagia algún desastre.
Llegar a Rincón de Parangueo es muy sencillo
La carretera 43 es la ruta para arribar. Rincón de Parangueo se encuentra a solo 40 minutos de Salamanca y a una hora de Irapuato o Celaya.