El Niño Dios Gigante de Zóquite podría convertirse en un atractivo turístico para el municipio de Guadalupe, comentó Eduardo Yarto Aponte, secretario de Turismo de Zacatecas.
Explicó que una ventaja del santuario de la comunidad de Zóquite, es la de estar ubicado cerca de otros atractivos, pudiendo conformarse un circuito que despierte el interés de los visitantes.
La Casa Grande de Tacoaleche, el Museo Comunitario de Zóquite y los Conos de Santa Mónica, son atractivos cercanos que pueden fortalecerse gracias al gran interés que despertó el niño dios, reconoció el funcionario.
Consideró que es viable promover visitas conjuntas para que los turistas estén ocupados gran parte del día y posteriormente pernocten en la capital o en algún hotel de Guadalupe.
Reconoció que primero será necesario monitorear el comportamiento de las visitas que tenga el santuario de Zóquite, y analizar los datos para conocer la dinámica y sus necesidades particulares.
Luego explicó que cuando se trata de turismo religioso, la infraestructura de los santuarios siempre se ve superada por la demanda.
Explicó que en dicho sector, el arribo de visitantes suele ser masivo, pero momentáneo y aislado, pues los grupos grandes de peregrinos están sólo por una horas en las que son insuficientes servicios como el de los sanitarios.
En vista de lo anterior –dijo- se buscará una dispersión del turista: Que vaya, visite el templo, pero que luego se dirija a otros puntos cercanos para que no todos lleguen al mismo tiempo y así las necesidades se repartan en varios lugares cercanos.
El secretario mencionó que la base del recorrido en dicha zona sería el sitio de los Conos de Santa Mónica, lugar abierto al público recientemente, ya que cuenta con baños, espacios de descaso y actividades ya programadas.
Sigue leyendo:
