Con gran emoción y después de una satisfactoria preparación eucarística, la niña Silvia Yaretzy llegó hasta el altar de la parroquia de Nuestra Señora del Santo Rosario, en donde ante fieles y demás invitados, Silvia escuchó atentamente la homilía brindada por el sacerdote. La festejada estuvo todo el tiempo junto a su madrina, Esmeralda Orozco, quien se mostró agradecida por formar parte de la vida espiritual de Sivia Yaretzy.
Antes de finalizar con la ceremonia religiosa, el sacerdote le otorgó la hostia y la bendijo, deseándole un grato camino, asimismo les pidió a sus padres continuar con el gran ejemplo que le brindan y así formarla dentro de un entorno social próspero y positivo.