Durante esta semana, celebramos el quinto aniversario de la Guardia Nacional marcando un hito significativo en las labores que se realizan reforzando la seguridad pública del país. Desde su creación en 2019, como parte de la estrategia del Presidente de la República, esta corporación ha desempeñado un papel fundamental en la protección de los ciudadanos y en la lucha contra la delincuencia, mostrando un crecimiento y un compromiso reconocible. Actualmente, cuenta con 130 mil elementos capacitados y una red de cuarteles en expansión, que le han permitido lograr importantes avances en su misión de pacificar el territorio nacional y fortalecer los vínculos con la ciudadanía.
Como ha sido evidente, Zacatecas es uno de los Estados que ha visto un despliegue sustancial de elementos de la Guardia Nacional. Esta región, medular por su posición geográfica y afectada por los índices de violencia, ha experimentado una mejora notable en la seguridad gracias a la presencia constante y la intervención activa de dicha institución. La llegada de estos efectivos ha contribuido a reducir la incidencia delictiva y, sobre todo, ha cambiado de manera positiva la percepción y el reconocimiento de la corporación entre la población zacatecana.
Las estrategias adoptadas han sido diversas, abarcando desde patrullajes permanentes y operativos conjuntos con otras fuerzas de seguridad, hasta acciones enfocadas en la prevención del delito, la atención a comunidades vulnerables, así como la construcción y el fomento a la paz, a través del activismo social que ha permitido humanizar y acercar a la corporación con la ciudadanía, acortando con tales esfuerzos los índices de criminalidad y reconstruyendo la confianza entre la sociedad y las fuerzas policiacas.
Un aspecto crucial del trabajo de la Guardia Nacional, ha sido precisamente su voluntad continua por fortalecer el vínculo con la ciudadanía. Las iniciativas comunitarias, los programas de proximidad social y su participación en eventos culturales, artísticos y deportivos, han sido herramientas clave para unir a los elementos de la Guardia Nacional con la población. Esta óptica es vital para generar confianza y con ello promover una cultura de paz y cooperación.
La construcción de cuarteles en todo el país es otro pilar fundamental de la estrategia nacional. La infraestructura adecuada da lugar a una respuesta más rápida y efectiva ante situaciones de emergencia y robustece su presencia en el territorio.
Sin lugar a dudas, no es tarea fácil la que desempeña la Guardia Nacional en México; a pesar de los avances y méritos, aún queda mucho por hacer. Existen numerosas áreas de oportunidad que deben ser abordadas, desde la necesidad de una mayor presencia en regiones azotadas por la violencia, hasta la implementación de nuevas estrategias para combatir la delincuencia organizada. La continua capacitación y la expansión de su infraestructura, son esenciales para enfrentar estos desafíos y consolidar los logros alcanzados en sus primeros cinco años de operación.