No es un secreto lo mucho que amo mi terruño y lo mucho que me interesa que a toda su gente le vaya bien. En cada aspiración por la que he luchado, sin duda, siempre he buscado tener en primer plano, si ésta me permite aportar algo mejor para mi gente fresnillense.
Desde muy pequeña, siempre me identifique con las acciones solidarias y la satisfacción de poder ayudar al prójimo; es un valor que me fue inculcado desde casa, pero de manera personal, creo que buscar atender causas, es lo que ha dirigido mi camino profesional, en esta labor de contribuir en mejorar las condiciones de aquellos en mayor vulnerabilidad.
De hecho, la razón por la que decidí estudiar la licenciatura en Educación Secundaria, fue con el objetivo de buscar desde la formación académica de los jóvenes, incentivar su interés por prepararse en el ámbito profesional y ser parte de un cambio, que favorezca la reconstrucción de nuestro tejido social.
Sin embargo, estas mismas convicciones, son las que me fueron involucraron en el mundo de la política y el servicio público; en el afán de participar en las acciones y, principalmente, la toma de decisiones, para coadyuvar en la transformación de una sociedad más justa, participativa, con mayores oportunidades y mejores condiciones.
Para ello, en los últimos diez años me he preparado en el ámbito profesional y laboral en la administración pública; puedo decir, además, que he sido parte del equipo del mejor político que tiene Zacatecas, el Dr. Ricardo Monreal Ávila.
Si bien, como muchos jóvenes fresnillenses, tuve que salir a prepararme fuera de mi tierra y trabajar de manera ardua, siempre fue con la convicción de luchar por espacios que me permitan seguir aportando mi granito de arena, en la transformación de México, mi estado y mi municipio.
Soy convencida que el tiempo y destino te van preparando para cada momento en la vida, sin excepción. Y como dicen por ahí, “la tierra llama”.
En este sentido, es que esta semana decidí registrarme como aspirante por Morena, para contender por la candidatura para la presidencia de mi Fresnillo.
Cumpliendo con los estatutos y la convocatoria establecida por mi partido, me encuentro muy contenta de tomar esta decisión, una aspiración legítima que solo proviene de querer aportar más a mi Mineral; después de todo, siempre hay que regresar algo de nosotros, a la tierra que nos vio nacer.
Quienes me conocen, saben de mi convicción e interés por impulsar que los fresnillenses sobresalgan y tengan mayores oportunidades; así como del trabajo social que he realizado, para lograr que nuestro Fresnillo sea un buen hogar, de paz y bienestar para todas y todos.
No olvidemos que, ¡es tiempo de las mujeres!, en 2024 por primera vez tendremos a una mujer presidiendo el país, la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo; así que, si las definiciones por las cuotas de género lo permiten, será un honor seguir trabajando duro, con orgullo y compromiso, siempre en colaboración con la sociedad, para seguir dignificando nuestra tierra, su desarrollo, historia y cultura.