Concluyeron las comparecencias de los funcionarios del gabinete ante la LXV Legislatura del Estado con motivo de la glosa del tercer informe de David Monreal Ávila. El distintivo: la mayoría de los secretarios no saben explicar bien los resultados de la actual administración y se exceden en los dichos. En tanto que, tampoco hubo el análisis político, jurídico, económico y social de los diputados (as), se registraron interrogantes muy extraviadas e imprecisas y la explicación hacia la población, los gobernados y los ciudadanos para un mejor entendimiento y fortalecimiento de la confianza del gobierno, no se cumplió, eso sí, se extendieron dudas, no se alcanzó la más clara y completa comunicación política y social con la sociedad, como debe ser parte del objetivo fundamental de una rendición de cuentas.

Aquí un muy somero análisis: con ejercicio autocrítico, el secretario General de Gobierno, Rodrigo Reyes Mugüerza abrió el serial de forma contundente y enfática al señalar que “la glosa no debe usarse para el escarnio, lejos de construir puentes de comunicación con los gobernados, las comparecencias se han convertido en momentos de confrontación que sólo buscan los reflectores mediáticos y no el beneficio colectivo”. Apenas el viernes la secretaria de Educación, Maricarmen Salinas Flores cerró las pasarelas y ante la diputación local sostuvo que “con la educación se transforman realidades, se construye la paz, se combaten las desigualdades, y se forja un futuro próspero para Zacatecas; es la educación el motor del desarrollo social y económico”. Ambos funcionarios pinzaron conceptualmente y resaltaron esencias de la obra de gobierno de Monreal. Sólo que la federalización de la nómina magisterial sigue atorada.

Destacaron las participaciones de los secretarios Ricardo Olivares Sánchez, de Finanzas; Arturo Medina Mayoral, de Seguridad Pública; Verónica Ivette Hernández López de Lara, de Administración; Bennelly Hernández Ruedas, de Desarrollo Social e Iván Reyes Millán, del Zacatecano Migrante. En el contexto de las crisis económica, de violencia e inseguridad, la gente opina que al resto de los secretarios les faltaron argumentos y aunque tuvieran razones, el lenguaje no les alcanzó para fortalecer la legitimidad y gobernabilidad, se vieron notoriamente muy limitados y la medianía de los legisladores no les motivó suficientemente para exaltar los hechos, que aunque sean una realidad, no fueron capaces de ilustrar con objetividad, y es aquí donde debe entrar la valoración y evaluación crítica para observar si están cumpliendo con su gran responsabilidad ante los gobernados y el gobernador, o le están fallado a Zacatecas, porque no empujan o estiran como equipo y al mismo ritmo y por esos leves efectos la fuerza de los tractores para la transformación, el campo, la minería, la industria y el turismo se rezagan o estancan.

Resultados en seguridad

En efecto, el general retirado Arturo Medina Mayoral resaltó los avances de la estrategia de pacificación, la reducción de homicidios dolosos hasta en 70%, son desarticuladas células delincuenciales, tarea casi cotidiana y logrado 5 mil 840 detenciones, y con firmeza lanzó el desafío: no permitiremos que ningún grupo criminal quiera apoderarse del estado. Era previsible, que el nuevo secretario de la Función Pública, Ernesto González Romo exaltó su protagonismo para pelearse con los diputados (as), sus excompañeros, reiteró presunciones de corrupción en base a denuncias de hechos que ya prescribieron; no pudo o no quiso dignificar la función pública, ni logró convencer a los diputados sobre su estrategia contra la corrupción; se resistió a dejar atrás su prepotencia. Informe sin mesura, ni seriedad. Fue patético.

La claridad, la sencillez que adopta en su lenguaje financiero, la objetividad de los números y datos por bien explicados y la veracidad sobre la situación económica estatal, que es de sanidad financiera y equilibrios presupuestarios, fueron conceptos y definiciones que ratifican el profesionalismo y la honestidad del secretario de Finanzas, Ricardo Olivares Sánchez. También era previsible, la intervención del secretario de Obras Públicas, José Luis de la Peña Alonso, exhibió novatez y escasa experiencia en el servicio público y en su exposición y respuestas a los diputados, dejó más dudas y confusiones sobre los temas carreteros y más concretamente sobre el viaducto elevado que no puede iniciar; por el solo hecho de haber confesado que el proyecto hídrico de Milpillas fue eliminado de la cartera de obras a realizar por la Secretaría de Hacienda. La secretaria del Agua y Medio Ambiente, Susana Rodríguez Márquez, pronto desconcertó, porque la gente considera es inaceptable que Zacatecas y su gobierno cedan ante la cancelación de Milpillas y de inmediato urgieron a la recuperación, porque está técnica y socialmente probado que puede y debe ser la solución integral al abastecimiento de agua potable desde Jiménez del Teúl hasta Guadalupe, por todo el eje central de la geografía estatal.

El escabroso tema de salud así quedó complejo e incierto, con más desconfianza y dudas, porque, aunque Uswaldo Pinedo Barrios, el secretario de Salud, defendió el régimen IMSS-Bienestar, nomás no pudo superar esa realidad que todo mundo cuestiona y resiente, las deficientes condiciones de la estructura hospitalaria, la falta de médicos y enfermeras, la ausencia de medicinas y la escasa sensibilidad social en el sector que pretende atender a un millón de personas que no cuentan con seguridad social, decepcionó. El tema de los migrantes fue bien tratado por el secretario del Zacatecano Migrante, Iván Reyes Millán, su información sobre la visita de 270 mil migrantes al estado y su derrama económica en su estancia, más las remesas, han hecho que sea trazada una política para la gobernanza con agenda de vinculación, transversalidad y de servicios, lo que refleja que los buenos resultados de la estrategia de pacificación atraen a los paisanos.

Cada quien sus datos

El secretario de Economía, Rodrigo Castañeda Miranda, insistió en que ya se ha recuperado la confianza de los empresarios y que los dueños del dinero que salieron con sus inversiones ya regresan al estado, y de inmediato la restregaron la interrogante ¿En qué Zacatecas vive secretario? Nadie de los diputados adentro de la Comisión de Desarrollo Económico, Industrial y Minería, le creyeron, ni afuera entre los sectores sociales, porque la realidad supera la visión y función del secretario de Economía, él es de la escuela de los otros datos, no es de la Unidad de Economía de la UAZ, donde los economistas son crítico y autocríticos, viven frente a la realidad. Castañeda Miranda más pareció promover y defender la estrategia de pacificación que el proyecto de desarrollo industrial y crecimiento económico, quedó que no le sabe, debe salir. De Le Roy Barragán, el secretario de Turismo dijo que la pacificación es clave para el turismo, destacó la promoción turística, que los zacatecanos y los visitantes califican como rústica, de los viejos tiempos, no se ha adaptado a las nuevas realidades tecnológicas, de difusión, propaganda y publicidad, no hay creatividad, se carece de inteligencia en la restauración de la imagen de grandeza de Zacatecas, los Pueblos Mágicos y los municipios. Falta mucho por hacer, pero con otro secretario.

En el caso de Bennelly Hernández Ruedas, que apenas tiene 3 semanas como secretaria de Desarrollo Social, recibió el beneficio de la duda, aunque bien sostiene la urgencia por hacer que los beneficios sociales se conviertan en derechos para los zacatecanos, una expresión congruente con las políticas sociales de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, que gradualmente los transforma en derechos constitucionales. Verónica Ivette Hernández López de Lara, la secretaria de Administración salió bien librada, las acciones de austeridad, optimización administrativa que mantiene sano equilibrio en la estructura institucional, ha sido instrumento eficaz para que se haga más con menos y se trabaje con honestidad, puntualidad y con trato muy sensible a los servidores públicos o trabajadores al servicio del estado. Y quien cerró la pasarela fue la secretaria de Educación, María del Carmen Salinas Flores, dejó claro, que, por la federalización de la nómina magisterial, la lucha sigue, invariable e indeclinable hasta consolidar el objetivo en favor de los trabajadores al servicio de la educación, el inmenso alumnado y las familias que confían en la educación como factor fundamental de las grandes transformaciones que ya viven México y Zacatecas.

Finalmente, concluyo el proceso de glosa que, para ser francos no fue tal, pero sí deberá ser sustento para que el gobernador David Monreal Ávila evalúe desempeños y decida los cambios, relevos o ajustes necesarios, para que esta segunda mitad del sexenio sea fructífera en obras y resultados, de máximo empoderamiento y de basamento para la continuidad de la 4T. Esa debe ser la normalidad democrática de plena gobernabilidad, más hechos que dichos.

Nos leemos la próxima semana.