/ martes 3 de septiembre de 2024

Crónica del poder / Venga un tercer informe con expectativas reales, no más sueños

A solo 5 días del cruce de los trienios municipales con el sexenio estatal de David Monreal Ávila, justamente el 8 de septiembre, el impacto social y político lo ha extendido el último informe del Presidente Andrés Manuel López Obrador, ante otro desbordante lleno de mexicanos de todo el país en el Zócalo de la Ciudad de México, bulliciosa y emotiva multitud a la que se integraron cientos de Zacatecanos liderados por sus gobernantes de los Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, en una convivencia que manifestó reconocimiento porque la cuarta transformación ha reproducido otra realidad del país, a través de obras educativas, de salud, seguridad y desarrollo social que han generado aires de justicia en el estado y porque se trata de un legado que entre los zacatecanos no puede ser negado.

Obvio que las expresiones políticas e ideológicas de López Obrador en el último informe de su gobierno, serán el gran sustento para evaluar lo hecho por David Monreal Ávila en favor de Zacatecas, y serán también punto de partida para la segunda parte de la nueva gobernanza, que tendrá que ser el más gigantesco y vigoroso esfuerzo colectivo, como la más poderosa aportación al segundo piso de transformaciones del nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo, quien ha ofrecido total apoyo al gobierno estatal y a los 58 municipios y las regiones en los entornos, sobre todo con Aguascalientes, Jalisco, San Luis Potosí, Coahuila y Durango.

Las expectativas de los zacatecanos desde todos los municipios, es que las acciones portentosas que son trazadas para los siguientes 3 años, sean alcanzadas por un un nuevo equipo de gabinete, caracterizado por óptimas cualidades de creatividad, inteligente planeación, suficientes y oportunas asignaciones presupuestales, por la más efectiva operación, ejecución de obras, extensión de servicios, promoción industrial, comercial y turística y el fortalecimiento de la imagen institucional gubernamental, que al fin supere la maldita y negativa percepción provocada por los eventos de violencia de alto impacto y las condiciones de inseguridad muy localizadas y mejor superadas por la estrategia de pacificación que se aplica con el respaldo presidencial a través del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional.

La persistente voluntad gubernamental por hacer que Zacatecas trascienda, tienen que ser apuntalada por mejores hombres y mujeres que para ocupar secretarías, subsecretarías y posiciones de segundo nivel, el gobernante se debe asomar a los académicos universitarios, a los grupos empresariales progresistas, a los valioso profesionales ya prestigiados por su honestidad y efectividad en sus funciones; y claro, contemplar a los notables ciudadanos más experimentados y reconocidos por sus trabajos, acciones y resultados de impacto positivo.

Nunca se olviden el mandatario y sus cuadros direccionales, que ahora tienen que ensamblar programas, metas y objetivos con la edificación del segundo piso que a partir del primero de octubre, la Presidenta de México comenzará a construir y para ello, es menester que los compromisos ya establecidos tengan fecha y espacio en la programación y hacia la realidad, porque la gente en las comunidades ya no quieren más confusión y menos incumplimientos, exigen acciones tangibles y concretas, un tercer informe con expectativas, no más sueños.

A solo 5 días del cruce de los trienios municipales con el sexenio estatal de David Monreal Ávila, justamente el 8 de septiembre, el impacto social y político lo ha extendido el último informe del Presidente Andrés Manuel López Obrador, ante otro desbordante lleno de mexicanos de todo el país en el Zócalo de la Ciudad de México, bulliciosa y emotiva multitud a la que se integraron cientos de Zacatecanos liderados por sus gobernantes de los Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, en una convivencia que manifestó reconocimiento porque la cuarta transformación ha reproducido otra realidad del país, a través de obras educativas, de salud, seguridad y desarrollo social que han generado aires de justicia en el estado y porque se trata de un legado que entre los zacatecanos no puede ser negado.

Obvio que las expresiones políticas e ideológicas de López Obrador en el último informe de su gobierno, serán el gran sustento para evaluar lo hecho por David Monreal Ávila en favor de Zacatecas, y serán también punto de partida para la segunda parte de la nueva gobernanza, que tendrá que ser el más gigantesco y vigoroso esfuerzo colectivo, como la más poderosa aportación al segundo piso de transformaciones del nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo, quien ha ofrecido total apoyo al gobierno estatal y a los 58 municipios y las regiones en los entornos, sobre todo con Aguascalientes, Jalisco, San Luis Potosí, Coahuila y Durango.

Las expectativas de los zacatecanos desde todos los municipios, es que las acciones portentosas que son trazadas para los siguientes 3 años, sean alcanzadas por un un nuevo equipo de gabinete, caracterizado por óptimas cualidades de creatividad, inteligente planeación, suficientes y oportunas asignaciones presupuestales, por la más efectiva operación, ejecución de obras, extensión de servicios, promoción industrial, comercial y turística y el fortalecimiento de la imagen institucional gubernamental, que al fin supere la maldita y negativa percepción provocada por los eventos de violencia de alto impacto y las condiciones de inseguridad muy localizadas y mejor superadas por la estrategia de pacificación que se aplica con el respaldo presidencial a través del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional.

La persistente voluntad gubernamental por hacer que Zacatecas trascienda, tienen que ser apuntalada por mejores hombres y mujeres que para ocupar secretarías, subsecretarías y posiciones de segundo nivel, el gobernante se debe asomar a los académicos universitarios, a los grupos empresariales progresistas, a los valioso profesionales ya prestigiados por su honestidad y efectividad en sus funciones; y claro, contemplar a los notables ciudadanos más experimentados y reconocidos por sus trabajos, acciones y resultados de impacto positivo.

Nunca se olviden el mandatario y sus cuadros direccionales, que ahora tienen que ensamblar programas, metas y objetivos con la edificación del segundo piso que a partir del primero de octubre, la Presidenta de México comenzará a construir y para ello, es menester que los compromisos ya establecidos tengan fecha y espacio en la programación y hacia la realidad, porque la gente en las comunidades ya no quieren más confusión y menos incumplimientos, exigen acciones tangibles y concretas, un tercer informe con expectativas, no más sueños.