/ jueves 25 de julio de 2024

Crónica del poder / Urgen renovadora meta y vigorosa marca turística de Zacatecas

Si en efecto y como lo anunció el gobernador David Monreal Ávila, vienen cambios en el gabinete, es obvio que ya tiene los nombres en la punta de la lengua y las designaciones, sean antes o después del tercer informe del 8 de septiembre, tienen que ser acordes, afines o en sintonía con la estructura presidencial de Claudia Sheinbaum Pardo, para que Zacatecas sea consecuente con la edificación del segundo piso de la cuarta transformación, con aportaciones dinámicas, progresistas y trascendentes que aceleren el desarrollo económico, social y cultural del estado, para que de una vez por todas, se rompa con la inercia del siempre lo mismo, para entrar ya a una vigorosa etapa de transformaciones.

Sin despegarse del impulso a los 4 ejes tractores que se plantean sobre el desarrollo, la minería, el campo, la industria y el turismo, sin duda el mandatario enfoca evaluación y balances sobre esos sectores y si tiene que enderezar cambios coherentes y audaces, deberá modificar prioridades y su legión de asesores, si es que realmente existen, tendrán que trabajar en serio y más responsablemente para que se den más y mejores resultados a los zacatecanos y que Zacatecas salga ya del estancamiento económico y de los graves rezagos que colocan al estado en los últimos lugares en todo o casi en todo y por que ya no se deben soportar más tribulaciones programáticas que no cumplen metas ni objetivos de progreso y bienestar, hazaña que se debe alcanzar con la vinculación directa y comprometida del sector empresarial.

Así por ejemplo, la nueva Secretaria de Turismo, Josefina Rodrigue Zamora, designada por la Presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo, que no la sacó de la manga ni por azar, sino que la descubrió como creativa, imaginativa y visionaria en el estado de Tlaxcala, lo que refleja una eficaz y formidable valoración de una funcionaria pública muy alejada de las relaciones del centralismo del poder y que de inmediato ha lanzado un nuevo concepto turístico sustentado en su propuesta local "Tlaxcala si Existe" qué consiste en atraer turismo con la riqueza natural y cultural de México, un esquema o diseño muy compatible con Zacatecas y su patrimonio cultural e histórico, aún inexplotado con sublimación y creatividad.

Como Tlaxcala, Zacatecas es mucho México, es la Patria suave trazada por el poeta Ramón López Velarde, es la musicalidad de Manuel M. Ponce y Candelario Huízar, es la gigantesca obra pictórica de Manuel Felguérez, Julio Ruelas, Francisco Goytia, Ismael Guardado y los Hermanos Pedro y Rafael Coronel; son las rutas turísticas que solo se enlazan o conectan en la retórica promocional y no en la realidad generadora de impactos y atracciones, como los 7 pueblos mágicos, las zonas arqueológicas desde Chicomostoc hasta el Cerro del Teúl, la trayectoria histórica del Camino Real de Tierra Adentro; el hermoso pueblo de Susticacan, las tradiciones folclóricas, religiosas, artesanales, gastronómicas y las añejas y anecdóticas tradiciones que elevan a nuestras provincias por encima de la modernidad que aburre, vestigios y valores que lo mismo están por los Cañones de Tlaltenango y Juchipila, que en el semidesierto o el altiplano del sureste.

Ese nuevo concepto turístico trazado por lo que será el gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo a partir del primero de octubre, tiene que dominar Zacatecas bajo sus propias cualidades y visiones, y eso merece un cambio, un relevo que rompa con la inercia de siempre.

Si en efecto y como lo anunció el gobernador David Monreal Ávila, vienen cambios en el gabinete, es obvio que ya tiene los nombres en la punta de la lengua y las designaciones, sean antes o después del tercer informe del 8 de septiembre, tienen que ser acordes, afines o en sintonía con la estructura presidencial de Claudia Sheinbaum Pardo, para que Zacatecas sea consecuente con la edificación del segundo piso de la cuarta transformación, con aportaciones dinámicas, progresistas y trascendentes que aceleren el desarrollo económico, social y cultural del estado, para que de una vez por todas, se rompa con la inercia del siempre lo mismo, para entrar ya a una vigorosa etapa de transformaciones.

Sin despegarse del impulso a los 4 ejes tractores que se plantean sobre el desarrollo, la minería, el campo, la industria y el turismo, sin duda el mandatario enfoca evaluación y balances sobre esos sectores y si tiene que enderezar cambios coherentes y audaces, deberá modificar prioridades y su legión de asesores, si es que realmente existen, tendrán que trabajar en serio y más responsablemente para que se den más y mejores resultados a los zacatecanos y que Zacatecas salga ya del estancamiento económico y de los graves rezagos que colocan al estado en los últimos lugares en todo o casi en todo y por que ya no se deben soportar más tribulaciones programáticas que no cumplen metas ni objetivos de progreso y bienestar, hazaña que se debe alcanzar con la vinculación directa y comprometida del sector empresarial.

Así por ejemplo, la nueva Secretaria de Turismo, Josefina Rodrigue Zamora, designada por la Presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo, que no la sacó de la manga ni por azar, sino que la descubrió como creativa, imaginativa y visionaria en el estado de Tlaxcala, lo que refleja una eficaz y formidable valoración de una funcionaria pública muy alejada de las relaciones del centralismo del poder y que de inmediato ha lanzado un nuevo concepto turístico sustentado en su propuesta local "Tlaxcala si Existe" qué consiste en atraer turismo con la riqueza natural y cultural de México, un esquema o diseño muy compatible con Zacatecas y su patrimonio cultural e histórico, aún inexplotado con sublimación y creatividad.

Como Tlaxcala, Zacatecas es mucho México, es la Patria suave trazada por el poeta Ramón López Velarde, es la musicalidad de Manuel M. Ponce y Candelario Huízar, es la gigantesca obra pictórica de Manuel Felguérez, Julio Ruelas, Francisco Goytia, Ismael Guardado y los Hermanos Pedro y Rafael Coronel; son las rutas turísticas que solo se enlazan o conectan en la retórica promocional y no en la realidad generadora de impactos y atracciones, como los 7 pueblos mágicos, las zonas arqueológicas desde Chicomostoc hasta el Cerro del Teúl, la trayectoria histórica del Camino Real de Tierra Adentro; el hermoso pueblo de Susticacan, las tradiciones folclóricas, religiosas, artesanales, gastronómicas y las añejas y anecdóticas tradiciones que elevan a nuestras provincias por encima de la modernidad que aburre, vestigios y valores que lo mismo están por los Cañones de Tlaltenango y Juchipila, que en el semidesierto o el altiplano del sureste.

Ese nuevo concepto turístico trazado por lo que será el gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo a partir del primero de octubre, tiene que dominar Zacatecas bajo sus propias cualidades y visiones, y eso merece un cambio, un relevo que rompa con la inercia de siempre.