/ lunes 21 de octubre de 2024

Crónica del poder / Ex gobernadores zacatecanos en la batalla parlamentaria nacional

Al ver los escenarios desde lo nacional a lo estatal sacudidos por conflictos, confrontación ideológica, desequilibrio entre los poderes, la hegemonía y avasallamiento de un solo partido y la ausencia de la sociedad que no decide actuación definitoria, necesariamente tenemos que admitir que la política está en crisis, los partidos ni sus diputados y senadores cumplen con sus grandes responsabilidades ante los intereses superiores de la Nación y del Estado, no muestran voluntad política para promover y buscar la conciliación en la pluralidad y mejor prefieren los rompimientos, el estallamiento de sus diferencias, la exaltación de las descalificaciones y el relanzamiento de los discursos de odio.

Los gobernados o representados en los estados y municipios aspiran a ver a sus actores políticos, gobernadores, senadores diputados y alcaldes, verdaderamente comprometidos en el impulso del bienestar familiar y comunitario, los ciudadanos en las colonias y ranchos o comunidades rurales que por ellos votaron, siguen a la espera de que se cumplan los compromisos, que ya cancelen o rompan la tradicional desafección tras las victorias electorales, porque siempre se olvidan de regresar a los distritos y municipios y en el caso de los diputados federales y senadores, como bien reclama y exhibe la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, ya no salen de sus palacios legislativos.

Entre los zacatecanos, sobre todo entre los priistas y sus aliados opositores a los regímenes nacional y estatal, redescubrieron con loas y satisfacción, haber visto el viernes al ex gobernador Miguel Alonso Reyes, por primera vez en la máxima tribuna nacional en la Cámara de Diputados, como un renovado y avezado parlamentario que durante la sesión solemne por el Bicentenario del Primer Congreso Constitucional de México, defendió la promoción de los valores y principios consagrados en la Carta Magna y sostuvo que la reforma judicial daña el equilibrio de poderes y trastoca la independencia judicial. El líder morenista Ricardo Monreal Ávila debió sentirse satisfecho.

Apenas habíamos comentado que en las bancadas del PRI en el Senado y la Cámara de Diputados, Claudia Anaya Mota y Miguel Alonso Reyes, estaban supeditados a los lineamientos y control del dirigente nacional Alejandro Moreno Cárdenas, Alito, y pronto se mostraron con autoridad y capacidad en las tribunas legislativas. Claudia Anaya había asumido férrea defensa de la autonomía del Poder Judicial y cuestionado el reformismo morenista; Miguel Alonso condenó que la excesiva concentración del poder público sea generador de gobierno autoritarios; se manifestó constitucionalista y defensor de la democracia la separación de poderes, pero también confió en que pronto los mexicanos y zacatecanos vivan en un país desarrollado, incluyente, con estabilidad, en paz y seguridad. Esencias de su discurso del viernes.

Como sea pues, en Zacatecas se aspira a que sus legisladores y políticos en el horizonte nacional pongan en alto el nombre de Zacatecas, sean de los partidos en el poder, Morena, el PT y Verde Ecologista o sean de la oposición del PAN, PRI, PRD y Movimiento Ciudadano, como así lo hacen por éstos últimos, la ex gobernadora Amalia García Medina, del Movimiento Ciudadano y Noemí Berenice Luna Ayala, de Acción Nacional, que ante la consigna del tiempo de las mujeres, asumen su fuerza política para hacer presente la firmeza opositora de hoy.

Al ver los escenarios desde lo nacional a lo estatal sacudidos por conflictos, confrontación ideológica, desequilibrio entre los poderes, la hegemonía y avasallamiento de un solo partido y la ausencia de la sociedad que no decide actuación definitoria, necesariamente tenemos que admitir que la política está en crisis, los partidos ni sus diputados y senadores cumplen con sus grandes responsabilidades ante los intereses superiores de la Nación y del Estado, no muestran voluntad política para promover y buscar la conciliación en la pluralidad y mejor prefieren los rompimientos, el estallamiento de sus diferencias, la exaltación de las descalificaciones y el relanzamiento de los discursos de odio.

Los gobernados o representados en los estados y municipios aspiran a ver a sus actores políticos, gobernadores, senadores diputados y alcaldes, verdaderamente comprometidos en el impulso del bienestar familiar y comunitario, los ciudadanos en las colonias y ranchos o comunidades rurales que por ellos votaron, siguen a la espera de que se cumplan los compromisos, que ya cancelen o rompan la tradicional desafección tras las victorias electorales, porque siempre se olvidan de regresar a los distritos y municipios y en el caso de los diputados federales y senadores, como bien reclama y exhibe la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, ya no salen de sus palacios legislativos.

Entre los zacatecanos, sobre todo entre los priistas y sus aliados opositores a los regímenes nacional y estatal, redescubrieron con loas y satisfacción, haber visto el viernes al ex gobernador Miguel Alonso Reyes, por primera vez en la máxima tribuna nacional en la Cámara de Diputados, como un renovado y avezado parlamentario que durante la sesión solemne por el Bicentenario del Primer Congreso Constitucional de México, defendió la promoción de los valores y principios consagrados en la Carta Magna y sostuvo que la reforma judicial daña el equilibrio de poderes y trastoca la independencia judicial. El líder morenista Ricardo Monreal Ávila debió sentirse satisfecho.

Apenas habíamos comentado que en las bancadas del PRI en el Senado y la Cámara de Diputados, Claudia Anaya Mota y Miguel Alonso Reyes, estaban supeditados a los lineamientos y control del dirigente nacional Alejandro Moreno Cárdenas, Alito, y pronto se mostraron con autoridad y capacidad en las tribunas legislativas. Claudia Anaya había asumido férrea defensa de la autonomía del Poder Judicial y cuestionado el reformismo morenista; Miguel Alonso condenó que la excesiva concentración del poder público sea generador de gobierno autoritarios; se manifestó constitucionalista y defensor de la democracia la separación de poderes, pero también confió en que pronto los mexicanos y zacatecanos vivan en un país desarrollado, incluyente, con estabilidad, en paz y seguridad. Esencias de su discurso del viernes.

Como sea pues, en Zacatecas se aspira a que sus legisladores y políticos en el horizonte nacional pongan en alto el nombre de Zacatecas, sean de los partidos en el poder, Morena, el PT y Verde Ecologista o sean de la oposición del PAN, PRI, PRD y Movimiento Ciudadano, como así lo hacen por éstos últimos, la ex gobernadora Amalia García Medina, del Movimiento Ciudadano y Noemí Berenice Luna Ayala, de Acción Nacional, que ante la consigna del tiempo de las mujeres, asumen su fuerza política para hacer presente la firmeza opositora de hoy.