/ martes 15 de octubre de 2024

Crónica del poder / Censurable e imperdonable negligencia sobre proyecto de Milpillas

En Zacatecas como en el país se viven tiempos de cambios, de transformaciones que impactan en el bienestar familiar, de las comunidades y de la población en general, pero más negativamente en las mayorías de pobres, marginados y necesitados de la fundamental integridad de los servicios públicos, pero en el estado esos cambios que se impulsan más parecen acumulación de conflictos que impiden el desarrollo de obras anheladas e incluso prometidas por los sucesivos gobiernos federales y por consecuencia, siguen las crisis, crece la emergencia social, continúa el estancamiento del desarrollo y la suspensión de obras que retrasan bienestar, certidumbre y mejor calidad de vida a la gente.

En este sentido, durante su comparecencia el jueves anterior ante el pleno de la Legislatura, la Secretaría del Agua y Medio Ambiente SAMA, sorprendió a los diputados y por consecuencia a los representados que son la población en los 58 municipios, que a pesar de que Claudia Sheinbaum Pardo expresó varias veces su compromiso de impulsar la construcción de la presa Milpillas, el mayor proyecto hídrico en la historia de Zacatecas, fue eliminado de la cartera de proyectos de la Secretaría de Hacienda del gobierno federal; desafortunadamente en julio desapareció la etiqueta de Milpillas como proyecto susceptible de financiamiento. Para mejor entendimiento de la gente, fue cancelado.

Para atar cabos, hay que asentar que precisamente el 19 de julio, durante su visita a Zacatecas como Presidenta Electa, ante miles de productores reiteró su compromiso de impulsar la construcción de la presa y la línea de conducción o acueducto de 167 kilómetros para abastecer agua potable desde Jiménez del Teúl, Fresnillo, Calera, Zacatecas Capital y Guadalupe e incluso habló de resolver los obstáculos que frenaron la obra desde hace 7 años y, si como asegura la Secretaria Susana Rodríguez Márquez, en julio fue eliminado el proyecto, días antes o después del reiterado compromiso de Sheinbaum Pardo, los zacatecanos reaccionan molestos y decepcionados por la actitud indolente y más negligente de los funcionarios federales y los estatales en SAMA, que ni siquiera han sido capaces de un responsable seguimiento al proyecto y provocaron un grave incidente de desinformación hacia la Presidenta electa.

Con ese irresponsable comportamiento trivializan el quehacer gubernamental, pero más le fallan al Gobernador y a la sociedad, sobretodo a los miles de pobladores del centro geográfico que será beneficiado con el proyecto acuífero; han incurrido en omisiones que por los daños que causan, son imperdonables, su desatención, el descuido y las imprudencias cometidas desde el gobierno de Alejandro Tello Cristerna hasta el presente, son censurables y son inacciones en las que debe concentrar atención y sanción la Secretaría de la Función Pública.

En verdad que resulta inconcebible que con esos errores y la ineficaz función pública, contribuyen al deterioro de un gobierno que a éstas alturas del medio sexenio, debe ser fuerte, estar en el máximo nivel de poder político y gubernamental, contar con la confianza de la gente, de los gobernados para seguir avanzando con otras obras de trascendencia como el viaducto elevado que se ha proyectado. La ausencia de sensibilidad política y social de los funcionarios de SAMA, los exhibe incapaces de asimilar los cambios y son motivo de censura y sanción.