El primero de septiembre es una fecha simbólica en la cultura política del país. El Presidente Venustiano Carranza estableció en 1917, por primera vez en la historia, que la lectura del informe presidencial se realice una vez al año cada primero de septiembre, precisamente al inicio de las sesiones ordinarias del Congreso de la Unión. La ley estabece que dicho informe se tiene que presentar por escrito. Sin embargo, la presentación por parte de los Presidentes ha cambiado a lo largo de los años y dependiendo del estilo personal de gobernar.
Durante varios años el primero de septiembre fue considerado el Día del Presidente debido a que el titular del Ejecutivo Federal asistía a la Cámara de Diputados a presentar su informe y prácticamente era ovacionado por los legisladores y asistentes en el recinto legislativo; incluso era día de descanso laboral a fin de que los mexicanos estuvieramos enterados. Entre las curiosidades se encuentra el Informe que presentó el Presidente Abelardo L. Rodríguez, el cual duró siete horas y media; y el más corto fue el del Presidente Vicente Fox, quien pronunció algunas palabras.
Con los cambios políticos, en los últimos años los Presidentes dejaron de asistir a la Cámara de Diputados y en su representación asistía el Secretario de Gobernación a entregar el Informe escrito; incluso se añadió la facultad de presentar una iniciativa preferente. Sin embargo, los Presidentes realizaron eventos en otros espacios para presentar y dar lectura de su informe de gobierno. Lo más importante no sólo es el informe, sino la historia que se relata a la población. Recordemos que comunicar es, en ocasiones, gobernar.
El Presidente López Obrador presentó, fiel a su estilo, su último informe de Gobierno en la plancha del zócalo de la Ciudad de México. Ahí estuvo rodeado de su equipo de trabajo y de sus simpatizantes que lo han acompañado por años. La narrativa fue cercanía con el pueblo, el poder regresó al pueblo. Puede agradarnos o no el Presidente, pero hay un hecho innegable y contundente: es un gran comunicador y conecta con la gente.
En el ámbito legislativo, el primero de septiembre se realiza la sesión de Congreso General para dar inicio al periodo de sesiones ordinarias. En el inició de la LXVI Legislatura señalé que ésta será histórica porque entregará la Banda Presidencial a la Dra. Claudia Sheinbaum, primera mujer Presidenta, lo que representa un cambio profundo en nuestro sistema político y el fin de la transición a la democracia.
Señalé que la Presidenta Sheinbaum es la máxima líder de los verdes porque nos enorgullece su formación ambiental. Con la próxima Presidenta compartimos la relevancia que tiene el desarrollo sustentable para el futuro de la humanidad entera. Le reiteré el compromiso total de los verdes de respaldarla durante todo su gobierno y que además cuenta con los votos de los legisladores verdes para todos sus proyectos y para consolidar la transformación de México.
